Cara Delevingne se sincera sobre sus problemas de adicción: "No estaba bien"
La modelo ha concedido una entrevista en el número de abril de 'Vogue'.
El pasado septiembre unos vídeos de Cara Delevingne en un aeropuerto de California en los que mostraba un comportamiento errático y un desmejorado aspecto físico dejaron preocupados a sus amigos, familiares y a sus fans. Ahora, la modelo revela una entrevista con Vogue que "no estaba bien" y que se está recuperando poco a poco de sus problemas de adicción.
La modelo, que protagoniza la portada del número de abril de la revista, cuenta en la extensa entrevista que lleva algo más de cuatro meses sobria después de un año "emocionalmente turbulento".
"No había dormido. No estaba bien. Me rompe el corazón porque pensé que me lo estaba pasando bien, pero llegó un punto en el que era como, 'vale, no tengo buen aspecto'. A veces necesitas una dosis de realidad, así que de alguna forma esas fotos son algo por lo que estar agredecida", revela Delevingne sobre las imágenes del aeropuerto.
Los vídeos y las fotos se tomaron tras el regreso de la modelo de Burning Man, un festival en el desierto de Nevada, y después de un verano en el que Delevingne pretendía celebrar y salir de fiesta lo máximo posible como despedida de la veintena. Sin embargo, la modelo se enfrentó a la muerte de su abuela en mayo y durante el verano se sintió sola e infeliz.
"Hay algo de sentirse invencible cuando tomo drogas. En esos momentos me pongo en peligro porque no me importa mi vida", reflexiona la modelo en la entrevista sobre ese período de su vida. "Da miedo hacerle eso a la gente que te rodea y te quiere", lamenta Delevingne, que revela que en septiembre decidió pedir ayuda a su círculo más cercano y, posteriormente, anotarse en un programa de rehabilitación.
La modelo y actriz cuenta que había tenido "intervenciones" en otras ocasiones pero que no habían llegado a buen puerto porque no estaba preparada, y es consciente de que nunca estará del todo recuperada. "Este proceso obviamente tiene altos y bajos, pero me empezado a dar cuenta de tantas cosas. La gente quiere que mi historia sea este especial de televisión en el que digo 'era una adicta y ahora estoy sobria y ya está'. No es tan simple. No pasa de la mañana a la noche", confiesa en la entrevista.
Desafortunadamente, los problemas de adicción siempre han formado parte de la vida de Delevingne ya que su madre, ha hablado largo y tendido de su trastorno bipolar y su adicción a la heroína. La modelo cuenta que durante años no fue capaz de ponerse en el lugar de su madre y de únicamente ser capaz de estar enfadada con ella. "No era su culpa... La manera en la que la adicción me separó de mi madre fue brutal, y también fue brutal para ella", reconoce.
En la entrevista, Delevingne también revela que su primera experiencia con el alcohol fue cuando tenía siete años, en una boda en la que iba probando copas con champán y de la que recuerda despertarse con resaca en su habitación con el vestido de dama de honor. La modelo también cuenta que con diez años le recetaron somníferos para combatir el insomnio y a los quince antidepresivos. Fue de adolescente cuando empezó a beber para "escapar" de su realidad y es el comportamiento que ha estado siguiendo hasta ahora para no afrontar sus problemas o sus sentimientos.
A medio plazo, la modelo quiere seguir "curándose" poco a poco. "Todavía tengo mucha energía pero no es errática. Estoy más calmada", confiesa.