Esto dice la ley sobre los despidos por parentesco y los miles de euros de indemnización
Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJCat).
Los despidos nulos se dan cuando se producen vulneraciones de derechos fundamentales a raíz de situaciones discriminatorias como estar embarazada, cuestión de sexo o su orientación sexual. A esto se suma si hay una razón de parentesco, algo que ha cambiado a raíz de una sentencia Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJCat).
Se trata del despido de un trabajador de la empresa Euromaclean 2001, al que tendrán que readmitirle e indemnizarle con 7.501 euros por haber vulnerado sus derechos fundamentales.
Los magistrados del tribunal, tal y como recoge Confilegal, han considerado que el despido fue una represalia a raíz de una discusión que tuvo su pareja, también empleada de la empresa, con un superior.
La empresa alegó que el trabajador, limpiador de los trenes del AVE en la estación de Sants, había descendido su rendimiento en enero de 2022 y varios compañeros habían tenido que ayudarles a cumplir su trabajo. Sin embargo, su pareja, jefa de cuadrilla y cuya relación conocía la empresa, había tenido una discusión con la dirección y se negó a dar los nombres de los compañeros que habían bajado el rendimiento.
Tras la demanda del trabajador, el Juzgado de lo Social Nº24 de Barcelona dictó sentencia el 23 de mayo de 2023 y consideró que el despido era improcedente y que Euromaclean 2001 debía readmitirle en las mismas condiciones, con el salario que había dejado de percibir y una indemnización de 4.317 euros.
Sin embargo, el trabajador recurrió y en esta nueva sentencia se ha dictaminado que el despido es nulo por vulnerar los derechos del trabajador a raíz de la discusión de su pareja. La Sala recordó el artículo 17.1 del Estatuto de los Trabajadores, que hace referencia a la prohibición de discriminación por parentesco en las relaciones laborales. Además, señaló que "concurre un nexo temporal innegable —un mes— entre la negativa de la pareja del trabajador despedido" y el cese.
"Consideramos lo suficientemente plausible un ánimo represaliador oculto en la decisión empresarial, dado que la conducta de la jefa de la cuadrilla pudo contrariar y molestar a la mercantil al encontrarse que una de sus empleadas, en la que había depositado su confianza para dirigir una cuadrilla, se negaba a dar cuenta acerca del rendimiento de sus subordinados", señalaron en la sentencia.
