Da 2.000 euros de sueldo base y 10 semanas de vacaciones: este empresario asombra al mundo con su modelo de éxito
"También habría que contabilizar el número de carcajadas", apunta el dueño del negocio.
"Mi objetivo es triple: tranquilidad, tiempo libre para todos, y compartir las ganancias". Así lo explica Jean-Pierre Delboulbe, en declaraciones que ha difundido Infobae. Es el director de una panadería local localizada en el pueblo francés de Castelsagrat y ha logrado establecer un modelo de negocio que se traduce en un ambiente de trabajo "casi idílico".
El modelo en cuestión consiste en trabajar cuatro días a la semana, sin reducción de salario, con un salario base de 2.000 euros netos. Al año, cada uno de los empleados cuenta con 10 semanas de vacaciones.
"También habría que contabilizar el número de carcajadas", comenta el empresario que empezó a sopesar en la idea que ha puesto en práctica cuando trabajaba en París. "Sólo tenía cinco semanas de vacaciones para poder ver a mi familia y a la de mi esposa", relata.
Fue precisamente en ese momento, todavía en 1997, cuando se decidió a emprender su propio negocio: Louboulbil. Comenzó como una cooperativa agrícola, que se servía de trigo local. Poco a poco, ha ido creciendo y produce alrededor de 300 toneladas de pan al año.
A día de hoy todos los trabajadores cuentan con un sueldo base de 2.000 euros que puede ir creciendo, por motivos como la antigüedad o algunas primas relacionadas con el desempeño en la compañía. "Cada uno hace su mercado, su ruta", cuenta una de las trabajadoras, Nathalie Tessier, en declaraciones que ha recogido Infobae.
Asegura, además, que "no hay presión, ni control, ni siquiera una expectativa de resultados porque, en el fondo, trabajamos para nosotros mismos". Es "una empresa anárquica, pero en el sentido de que hay mucha libertad", concluye.
