Tropieza con un pequeño objeto blanco y acaba descubriendo que pertenecía a un depredador legendario
El hallazgo se ha hecho viral en las redes sociales.
A veces, los descubrimientos más sorprendentes ocurren cuando menos lo esperamos. Algo tan cotidiano como esparcir grava en un jardín puede convertirse en una conexión inesperada con la historia de la naturaleza. Eso es exactamente lo que le sucedió a Steven Phillipe, en su casa de Bellingham, Washington.
Lo que comenzó como un simple proyecto de jardinería terminó en un hallazgo inesperado. Mientras trabajaba con su vecino en el jardín, encontró un pequeño objeto blanco entre la grava que había comprado en una tienda local. Al examinarlo más de cerca, se dio cuenta de que lo que tenía en la mano no era una simple roca, sino un diente de tiburón.
Del mar a la grava
Phillipe, de 38 años, había adquirido un par de bolsas de roca volcánica roja Vigoro en la tienda local Home Depot, sin imaginar que dentro de la grava se encontraba un fragmento de la historia de la naturaleza.
Inicialmente, su vecino, que le acompañaba en el momento de los hechos, pensó que estaba bromeando, sin embargo, el hallazgo era real. Se trataba de un diente grande, plano y con bordes serrados que había pertenecido a un gran tiburón blanco.
Intrigado, investigó en Internet y descubrió que las rocas volcánicas en las que encontró el diente probablemente provenían de canteras en Nuevo México, California o Utah. Aunque es posible encontrar fósiles en este tipo de grava, dar con un diente de un depredador tan legendario es algo poco común.
Un descubrimiento viral
La historia rápidamente captó la atención en redes sociales, donde Phillipe compartió su hallazgo en Reddit, generando debate entre los usuarios sobre el posible origen del fósil. Su familia ha convertido el diente en un tema de conversación y un tesoro familiar. De hecho, sus hijos lo llevaron a la escuela para mostrárselo a sus compañeros, y ahora planean conservarlo en su “mini museo” personal o incluso transformarlo en un collar.
Phillipe y su familia nunca imaginaron que un simple día de jardinería los conectaría con una criatura tan prehistórica. “No todos los días se encuentra un trozo de una bestia monstruosa en el noroeste del Pacífico”, comentó emocionado.
