Mortadelo y Filemón ya "dirigen" el tráfico de Barcelona con su semáforo
Un gran homenaje a Francisco Ibáñez en la ciudad condal.
Mortadelo y Filemón han comenzado a "controlar" el tráfico en Barcelona. Un semáforo con la figura de los míticos personajes de cómic ya está en funcionamiento en la ciudad condal, en un homenaje a su creador, Francisco Ibáñez.
Este es solo el primero de los cuatro que se instalaran en la capital de la comunidad catalana. Su ubicación no ha podido ser más emblemática: en el cruce de la calle de Treball con Concili de Trento, en el distrito de Sant Martí, justo donde vivió el recientemente fallecido dibujante.
Así, Mortadelo es el verde; Filemón, el rojo. Los particulares agentes de la T.I.A pasan a "dirigir" el paso de peatones y vehículos haciendo realidad la genial idea de Francisco José Ibáñez, un profesor de Tafalla (Navarra) que propuso la idea en las redes sociales. Tal fue el alcance de su publicación en X -anteriormente Twitter- que el pasado 14 de agosto presentó la propuesta en el Ayuntamiento de Barcelona y, solo 10 días después, recibía un sí por parte del consistorio.
"Aquello se convirtió en un clamor popular para todos los que hemos leído, desayunado y merendado con los tebeos de Ibáñez y decidimos atender esta maravillosa propuesta, con permiso de la familia y la editorial", ha remarcado el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, remarcando lo genial de la iniciativa.
La hija del dibujante, Núria Ibáñez, también ha compartido su gratitud ante tan bonito gesto con su padre, indicando que "le habría encantado. Se hubiera reído mucho con la propuesta y la idea, pensaría que sería divertidísimo ver a Mortadelo y Filemón cambiar constantemente de verde a rojo", ha remarcado.
Las redes sociales, volcadas ante este primer semáforo
La inauguración no ha pasado desapercibida por los usuarios de la red social china, que ya han hecho pública su ilusión porque los dos personajes icónicos de Ibáñez tengan su hueco en su ciudad natal.
El homenaje se extenderá con la instalación de tres semáforos más con la figura de los personales en la Gran Via, en la esquina con la calle Bac de Roda, Urgell-Manso, y en Ronda Sant Pere-paseo de Gràcia. No obstante, el legado cómico de Ibáñez es tan grande que hay algunos que desean que la iniciativa se extendiera a otras ciudades españolas.