La Mala Rodríguez: "Voy a votar, claro. Voy a votar en blanco"
Entrevista con la cantante, que lanza 'No soy un ángel', una colaboración con Omar Montes.
"Como persona del medio del entretenimiento me parece divertido usar mi personaje para pinchar un poco", afirma La Mala Rodríguez. Como figura pública, no rehúye charcos ni se deja influir por opiniones ajenas, pero como María Rodríguez Garrido (Jerez, 1979), admite que es "como queso fundido". De hecho, durante esta entrevista, llega a emocionarse hablando de sus hijos.
La artista conversó con El HuffPost unos días antes de que este viernes viera la luz su último tema, una colaboración con Omar Montes titulada No soy un ángel, que como define, "suena al típico momento de cuando la cagas". Al tiempo, sigue trabajando en su próximo disco, para el que está deseando tener fecha y apunta a una futura sesión con Bizarrap, con quien está en contacto.
Tras bromear con que se va a presentar a presidenta del Gobierno, reconoce que no se siente reflejada en ninguno de los partidos políticos actuales, pero que acudirá a las urnas este domingo. Cuenta qué haría ella con los impuestos, el aborto o la cultura, y reflexiona sobre qué es lo que le ha permitido mantenerse en el mundo de la música durante más de dos décadas.
¿Cómo se gestó esta colaboración con Omar Montes?
Escuchó la canción y dijo que quería montarse en ella, que le encantaría. Luego él le puso su sello personal y además hizo cambios en la música. Era una canción que llevaba como mucho rato en el horno, mucho tiempo trabajándola —porque llevo en el proceso de mi álbum desde la pandemia— e imagínate: le hemos dado vueltas, hemos grabado voces mil veces, hemos metido cuerdas, hemos metido lo otro... Y él ha cogido y ha dicho: "Espérate un momento. ¿Y si hacemos esto con esta canción, lo otro...". Es muy creativo y tiene muchas buenas ideas. Me encantó colaborar con él porque realmente esto es a lo que llamo colaboración, a que de verdad un artista se impregne del otro y estemos al 200% en una canción. Y el vídeo también, todo muy bonito.
¿Y a qué suena No soy un ángel?
Pues suena al típico momento de cuando la cagas.
¡Menuda descripción!
A cuando tú eres fiel a ti y haces las cosas porque crees en ti y porque realmente piensas que tienes que hacerlo. Para mí, la canción No soy un ángel es explicar que todo el mundo es humano y todos aquí cometemos errores. Es un poco reafirmarse en que realmente la gente no cambia.
¿Y cómo es Omar en las distancias cortas?
Pues hermoso. Hermoso de verdad. Cuando él dice lo de seres de luz, él es un ser de luz. Es muy bueno, es una buena persona, y creo que por eso tiene tantas bendiciones, porque es una persona buena. Es lo más importante, que uno sea buena persona.
Escuchándote, ha fluido...
Sí, ha fluido mucho, muy bien. Y además, mucho respeto. Recuerdo que cuando él escribió su libro, me lo mandó, lo leí y le dije que me encantó. Me dijo: "¿Pero de verdad te lo has leído?". Y yo: "¡Pues claro!". Y me pareció muy bonito que compartiera esa experiencia de vida con los demás. Creo que todo el mundo tiene algo que contar y todo el mundo tenemos algo que aprender de los demás.
Estás en ese proceso de elaboración de disco desde la pandemia. ¿Ves alguna fecha en el horizonte?
Yo no soy la que pone las fechas, yo sólo soy una mandá. Pero espero que pronto me puedan dar una fecha para poder sacarlo. Sobre todo, porque el proceso no ha terminado y porque la gente con la que estoy trabajándolo es un equipo que cree en que las cosas deben tardar. No puedes hacer un disco en dos meses. Estoy completamente convencida de que va a estar bueno, que va a ser digna la espera.
En una de tus últimas publicaciones de Instagram, había un usuario que ponía: "¿Cuándo algo de rap?". Y empezaban a debatir unos seguidores con otros. ¿Qué contestarías tú?
Hay mucha desinformación sobre el asunto porque para mí una cosa es hip hop, que es como la cultura, y que tiene que ver con inspirar a otros, hablar de tus vivencias y compartirlas con la comunidad, y otra cosa es rapear, que lo puede hacer cualquiera. Esa es la diferencia para mí y yo creo que siempre he seguido siendo una figura dentro del panorama del hip hop. He seguido siendo fiel a mí y, vaya por donde vaya mi vida —cuando he tenido un fracaso, cuando he estado perdida, o cuando he estado muy consciente a lo largo de mi carrera—, lo he plasmado en mi música. Yo sí me sigo sintiendo comprometida y fiel a mi vida. Creo que me sigo manteniendo real. Muchos creen que cuando no estás haciendo unas letras sociales o de crítica, ya eso no es rap, y es una tontería, yo no lo comparto esa opinión. Creo que una cosa es rap y otra el hip hop y considero que la mezcla que empecé a hacer el primer día cuando hice mi primer disco, Lujo ibérico, ahí ya estaba mezclando hip hop con folclor, con historias de mujer, algo personal... Yo he seguido mi propio camino. Cada uno entiendo que tiene su propia perspectiva y desde ahí cada uno habla. Yo no entro, yo sé lo que yo hago, y está bien que cada uno tenga su visión, pero no voy a entrar a debatir.
Hace poco se lió bastante con lo que dijiste de los impuestos. ¿Se entendió lo que querías decir?
No, para nada. No se entiende nunca nada.
Entonces, ¿qué es lo que defendías?
Hay muchos bajones en Sanidad, en Educación, y siempre piden más impuestos, más impuestos, pero nada llega a verse reflejado en nuestra Sanidad, ni en la Educación, que siempre es superpobre, y siempre está la gente pasándolo muy mal. En mi familia muchísima gente trabaja en Sanidad y en Educación, precisamente, y veo que cualquier ciudadano de este país merece que mejoren. Por eso digo: "¿Dónde está el dinero?". Porque pagamos muchísimos impuestos para cómo está la cosa. Es lo que siento. Pero, obviamente, vuelvo a repetirlo, cada uno habla desde su prisma.
¿Y esto de que te vas a presentar a presidenta va en serio?
[Se ríe] Yo creo que este hombre, Pedro Sánchez, ha adelantado las elecciones porque sabía que si yo me presentaba lo iba a tumbar [Vuelve a reír y da palmadas]. Me meo, te lo juro. Yo me lo paso bien. Me encanta decir tonterías porque al final, puedo estar callada y, si hablo, hablo de cosas serias, pero luego cuando estás en un medio que se llama entretenimiento' considero que eso también es parte de mi trabajo y hacer el payaso no me cuesta nada.
Se especuló con que esto fuera verdad, con que si eras más de izquierdas o de derechas... ¿Ahora mismo, te sientes representada en algún partido?
No, en ninguno.
¿Necesitarías el tuyo?
Y mucha gente como yo, además. Creo que hay mucho racismo y mucho radicalismo, que tampoco me gusta. Hay modelos de países que me encantan, como por ejemplo los nórdicos. Me gustan pero entiendo que allí tienen más dinero. No creo que haya una buena administración aquí en España, pero claro, te habla María Rodríguez Garrido, que no tiene ni una carrera. ¿Quién soy yo para opinar?
¿Y vas a votar este 23J?
Voy a votar, claro. Voy a votar en blanco. ¿Eso es que cuenta tu voto, no? Ahí va mi voto.
Si nos imaginamos que sales elegida presidenta, ¿qué harías por la cultura en España?
Apoyaría los sindicatos de artistas, porque los artistas aquí son muy maltratados. No es como en Francia, por ejemplo. Realmente, en los artistas, a no ser que seas una superestrella, el día a día —yo que paso mucho tiempo con muchos de ellos y me considero también así— se basa en mucho trabajo porque nadie te cubre las espaldas. Cuando digo artistas, también hablo de bailarines y gente que está en el medio, que lo pasan muy mal porque siempre viven al día.
¿Qué harías con el aborto? Porque también fueron sonadas tus declaraciones.
Entiendo que cada uno es responsable de elegir, pero yo como figura pública sí que me siento como obligada a decir que yo no lo haría. Es mi opinión personal, a título personal, y tengo tanto derecho de decirlo como que otro quiera hacerlo. Si tú quieres hacerlo, hazlo, yo no voy a decir que no lo hagas, pero yo no lo haría.
Muchas figuras de la cultura están mostrando preocupación y alzando la voz por la censura [por casos como el de Orlando, de Virginia Woolf, o el beso lésbico de Lightyear]. ¿Te preocupa también este tema?
Pues eso, el radicalismo... tanto de un lado como de otro. No me parece muy lógico. Es una obra de arte y cada uno tiene derecho a hacer una obra de arte, mientras que no estés faltando al respeto a nadie. Si no es una obra racista, si no estás faltando el respeto a ningún ser humano. No me gusta la censura. Creo que prohibir no logra nada tampoco.
Y otro tema sobre el que te quería preguntar si te preocupa es el auge de la inteligencia artificial y cómo puede afectar a la música.
Ya... Yo voy a hacer un tema con mi voz de la IA y ya me acuesto y ya [se ríe]. Pues mira, este debate es serio porque es como que volvemos otra vez a cuando llegó internet y se podía piratear la música. Llegará un momento en el que se controle eso y se ponga a favor, pero es cierto que la gente ahora entra en panic y lo vean como algo superpeligroso. Me encantó ver a la niñera, a la nanny, ¿la viste?
La de la huelga de actores de Hollywood, ¿no?
Sí, ¿quién iba a decir que era ella la que iba a llevar la guerra contra los robots? Esta actriz [Fran Drescher] me encantaba. No sé, yo es que tengo una personalidad como muy espiritual y siento como que todo está escrito y pienso mucho que si por algo ocurren las cosas es como cosa del destino y que no se podrá parar. El mundo está como patas arriba, lo que parece que es malo, yo creo que es bueno, es todo del revés.
Cambiando un poco de tema; la frase de "las mujeres ya no lloran, las mujeres facturan", ¿te la aplicas?
Yo lloro muchísimo. Lloro mazo, la verdad. Soy un poco llorona, me emociono muy rápido. Y facturo también. Pero creo que no debe ser que dejemos de llorar, creo que la parte emocional no la podemos tapar, tenemos que llorar y facturar.
¿Choca que una mujer hable de dinero?
Sí, hablar de dinero siempre está feo. Es como hablar de política o hablar de pollas. Incomoda, pero ya te digo, como persona del medio del entretenimiento me parece divertido usar mi personaje para pinchar un poco.
¿Y cuando no estás bajo el personaje, cómo eres?
Soy como queso fundido. Como una gatita. Soy muy tranquila y muy soñadora, la verdad, y me encanta no tener que estar luchando todo el día, pero hay que luchar.
¿Cómo llevas el cumplir años y el paso del tiempo?
Siento que no existe el tiempo. El tiempo no existe, siempre vivo en el ahora. Esto es lo más importante, vivir el presente. Hay gente que vive en el pasado y me pone muy de los nervios. Me gusta vivir este momento, lo quiero saborear. Y tampoco me como la olla con lo que va a pasar mañana. Me pongo unos objetivos, unas metas, e intento ir recta por ahí, pero me parece que es mejor estar en el presente, más que pensar en el paso del tiempo. El concepto tiempo no me gusta.
Con las décadas que llevas en la música, ¿cómo crees que te has mantenido, qué es lo que ha hecho que La Mala Rodríguez siga?
Creo que el truco es tener una actitud de aprendizaje, no de maestro.
¿Tus hijos escuchan tu música, te dan su opinión? ¿Qué te comentan?
Sí, sí, claro. Y les gusta. La verdad es que me ven como artista y me ven como madre también, entienden muy bien esas dos facetas. Me respetan mucho por mi carrera, respetan mucho a su madre. Saben que he luchado mucho por ellos y, la verdad, me emociona mucho [se le llenan los ojos de lágrimas y paramos un momento].
Son superamorosos. Entienden realmente cómo una mujer, con lo que le ha dado la vida ha cogido, ha hecho brum y lo ha transformado para que vaya a su favor la situación y siendo muy joven. Están muy orgullosos de que los haya sacado adelante, sola y con valores.
Has figurado en la lista de Spotify de Obama. ¿Eso no da muchísimo vértigo?
¡Son cosas locas! Es que la vida es superloca, me encanta que pasen cosas así. Es como... ¿esto es un error en la Matrix? Es muy divertido.
¿Qué otras cosas así que nunca te hubieras esperado te ha permitido la música?
Viajar mucho. Imagínate, yo vengo de una familia superhumilde y mi abuela no sabía ni leer ni escribir. Ya para mí todo lo que yo tengo es bonus. Bonus, bonus, bonus, bonus. Hay que levantarse siempre con las gracias en la boca. Mi madre ha hecho un trabajo muy grande por mí. Me tuvo también muy joven y ha sido mi puente para que yo pudiera tener la vida que tengo ahora. Nunca me ha puesto límites, siempre me ha dicho: "Lee, lee, lee. Fórmate, llena tu cabeza de cosas importantes, interesantes". Creo que tengo mucha suerte.
¿Lees mucho?
Sí. Me encanta leer. Me gusta mucho leer ensayo, me gusta leer de física, me gusta leer de matemáticas... Me gusta mucho la literatura rusa, la poesía vieja, cosas así, pero sobre todo me gusta mucho la ciencia, me parece muy divertida.
¿Qué crees que hubieras sido de no ser cantante?
No sé, eso lo sabe Dios. No lo sé, pero yo quería cantar.
¿Te ves participando en el Benidorm Fest o no es algo que te interese?
Ni me lo había planteado, pero no tengo complejos de nada. De hecho, me abrí el Onlyfans y ahora me lo he cerrado. No tengo ningún problema de lo que la gente pueda opinar, eso no me importa nada y eso es también bueno como concepto: que no te importe ni una mierda lo que la gente piense, tú haz lo que tú quieras y ve aprendiendo. Uno tiene que vivir, vivir, vivir, tener muchas experiencias. Eso es lo que hace a una persona con carácter, con opinión.
Empezábamos la entrevista hablando de la colaboración con Omar Montes. ¿Tienes alguna soñada, que desearías hacer?
[Piensa] Pues con Rosalía [se echa a reír y da palmadas].
¿Y un Bizarrap?
Él y yo estamos en contacto. Supongo que en algún momento tendrá que darse. Hace mucho que estamos en contacto para ver si hacemos una sesión. Estaría guay. Yo lo que quiero es que salga mi disco. Tengo muchísimas ganas, me apetecía mucho volver a otro tipo de temáticas y creo que le va a gustar mucho a la gente. Yo voy como la Luna, por ciclos, y éste album es especial.