La hija de Noel Gallagher responde a los comentarios de desprecio contra las fans jóvenes de Oasis
Anaïs Gallagher ha dejado claro que cualquiera tiene derecho a disfrutar de la gira de reencuentro del grupo británico.
El anuncio de la gira de reencuentro de Oasis provocó la semana pasada un auténtico terremoto en la industria musical y especialmente entre sus millones de fans, que llevaban quince años esperando que Liam y Noel Gallagher resolvieran sus enfados y peleas.
No ha trascendido por qué los hermanos Gallagher han decidido que el verano de 2025 es el momento indicado para volver a los escenarios, pero lo cierto es que el grupo dará una veintena de conciertos en Reino Unido e Irlanda para los que ha sido una auténtica odisea conseguir entradas.
Los tickets salieron a la venta el pasado sábado provocando un colapso en Ticketmaster y hasta la Comisión Europea ha anunciado que investigará el aumento de precios por parte de la web y las decenas de entradas que ya se venden por cifras astronómicas en las webs de reventa.
En este sentido, algunos fans de toda la vida de Oasis que tuvieron la oportunidad de ver al grupo en directo en los noventa han puesto el grito en el cielo por la posibilidad de que las fans más jóvenes del grupo pudieran hacerse con una entrada.
“Imagina esperar 15 años a que Oasis se reúnan y quedarte sin entradas por Chloe, de 20 años, conductora de un Fiat 500 que vive en Stockport y lo único que quiere es escuchar Wonderwall en directo”, dijo un usuario en una frase que se viralizó en los últimos días y la que muchas mujeres han respondido.
Entre ellas, Anaïs Gallagher, la hija de 24 años de Noel, que no dudó en comentar un vídeo de la tiktoker Josie Cannell en el que recordaba que Oasis es una banda intergeneracional y mainstream.
“No voy a tolerar la discriminación por edad y la misoginia alrededor del tema de conseguir entradas. Lo siento, pero si quiere estar ahí una chica de 19 años con un sombrero de cowboy rosa, yo tendré preparadas mis pulseras de la amistad”, comentó Gallagher en referencia a las populares pulseras de la amistad que lucen las fans de Taylor Swift en sus conciertos.