La fruta prohibida en los hoteles se convierte en pelotazo

La fruta prohibida en los hoteles se convierte en pelotazo

Hasta hace unos años tenía muy mala fama.

Un durianGetty Images

El durian es una de las frutas más populares del Sudeste Asiático, donde crece con mucha abundancia en países como Filipinas, Malasia o Tailandia. Sin embargo, no es la fruta que mejor fama tiene ya que está prohibida en hoteles y espacios públicos por su fuerte y desagradable olor, que puede permanecer en el ambiente durante horas. 

Esta fruta tiene habitualmente el tamaño de una pelota de rugby un olor que muchos describen como "metálico, gomoso, quemado, a queso, a ajo, a cebolla y miel", pero también un combinación de "trementina y cebolla con un calcetín usado". 

Una carta de presentación poco apetecible que ha cambiado desde que en China comenzaron a fijarse en el durian, tal y como revela The New York Times en un reportaje publicado recientemente sobre el repentino furor por esta fruta. 

Para el reportaje, los periodistas del periódico estadounidense charlaron con Eric Chan, un programador de Malasia, que dejó su trabajo para vender esta fruta. Durante su infancia, los durians se podían comprar a precios muy asequibles en furgonetas o camiones, hasta que China comenzó a importar cada vez más este producto. 

El furor es tal que Chan es ahora millonario después de vender parte de su empresa, que se dedica a la producción de pasta de durian para elaborar recetas como galletas o helados con sabor a esta fruta, por casi cinco millones de dólares. 

Según los datos de The New York Times, las exportaciones desde el Sudeste Asiático hacia China fueron de seis mil millones de dólares, doce veces más que en 2017. Además, según las Naciones Unidas, China compra todas las exportaciones de esta fruta, de cuyo principal productor es Tailandia.