Este producto cuesta 1 euro y hace maravillas con tu lavadora
Llevar a cabo este sencillo consejo permitirá mantener en perfectas condiciones el electrodoméstico durante más tiempo.
La lavadora es uno de esos electrodomésticos a los que, eventualmente, es necesario dedicar un tiempo para garantizar su correcto funcionamiento. Entre los principales problemas destacan, por encima de todos, la gran acumulación de moho que puede producirse como fruto de su uso y una incorrecta 'ventilación' del tambor.
Este problema afecta a la lavadora en general, pero en concreto a las juntas de goma de la lavadora, e incluso en el interior, lo que puede traducirse en malos olores tanto en el interior del electrodoméstico, como en la propia ropa.
Para evitarlo, hay una alternativa muy fácil de aplicar y con la que este problema dejará de serlo: utilizar peróxido de hidrógeno, o mejor dicho, y para que sea más fácil de entender: agua oxigenada.
De este modo, aseguran que, para evitar los malos olores y problemas derivados de la humedad y el moho, un gran aliado puede ser el agua oxigenada, introduciendo este producto en el lugar donde habitualmente se coloca el detergente y activar el ciclo más caliente de la máquina.
Esta opción es extremadamente barata (apenas cuesta un eruo) y más si se compara con los enormes beneficios que tienen en el funcionamiento de la lavadora. Pero no es la única forma, ya que si se siguen algunos pasos y consejos muy fáciles de conseguir, se podrá evitar la acumulación de moho y residuos de detergente dentro del tambor.
Para ello, es muy importante seguir algunos pasos:
- Mantener la puerta abierta después de cada lavado
- Limpiar bien debajo de las solapas
- Dejar el tambor abierto de forma habitual para evitar acumulación de humedad
- Limpiar de forma periódica el filtro y ejecutar un ciclo de agua caliente.