La carne picada que en realidad no lo es: infórmate antes de comprarla
No todo lo que compras pensando que es carne picada lo es realmente.
La carne picada es uno de esos productos que no falta en las listas de la compra de muchas familias en España. Además de asequible, su versatilidad hace que sea posible la preparación de muchos platos. Pero, ¿es carne picada de verdad lo que metemos en la cesta de la compra?
Si quieres comprar carne picada, básicamente tienes dos opciones: pedir en la carnicería que la prepare al momento o comprar una bandeja con el producto preparado. Una opción rápida y cómoda que viene con sorpresa. La mayor parte no tienen carne picada sino un "preparado de carne" o, como también se le conoce, Burger Meat.
Así lo revelaba un estudio de la OCU de hace unos años en el que analizaban una docena de carnes picadas disponibles en varios supermercados para determinar cuál era la mejor. Las conclusiones hablaban por sí solas: "No son productos malos, se pueden consumir sin problemas, pero no es lo mismo que la carne picada". Una polémica que recuperaba el doctor en Ciencia y Tecnología Miguel A. Lurueña, autor del libro Que no te líen con la comida, en un hilo de Twitter en el que analizaba el contenido y la composición de la bandeja de carne picada que se había cruzado en el supermercado.
"¿Carne picada? No. En realidad es un preparado de carne, compuesto por un 95% de carne y un 5% de otros ingredientes", comentaba el doctor junto a una fotografía del paquete de carne picada. "Para que se pueda llamar "carne" solo puede llevar carne (y como mucho, sal: menos del 1%)", aclaraba poco después en otro tuit.
¿Pueden los supermercados vender Burger Meat? Sí, aclaran desde la OCU, que advierte que en algunas ocasiones la presencia de carne es inferior al 80 %. "El problema es que a menudo el consumidor no se entera, pues la mención no aparece de forma clara, sino que en el etiquetado se resaltan otros conceptos", explican desde la organización que defiende a los consumidores.
"La palabra 'picada' del frontal del envase puede hacernos pensar que se trata de carne picada, es decir, carne y nada más. Pero es muy raro encontrar carne picada envasada porque tiene una caducidad muy corta: 24 horas si se vende a granel y unos pocos días si se vende en atmósfera protectora", destaca Lureña en otro de sus tuits.
¿Cómo saber si la carne picada es real?
A la carne picada del supermercado se le puede llamar de muchas formas, pero para saber si nos llevamos un producto de calidad debemos leer la etiqueta de composición. Si hablamos de carne picada 100%, el contenido de grasa no puede exceder el 20% y la proporción de colágeno o proteína no puede superar el 15%.
Para los preparados de carne picada, se permite la combinación de la carne con otros ingredientes como cereales, sal y especias. No obstante, se debe indicar claramente el porcentaje total de carne que contiene.
La Burger Meat es la opción menos favorable, ya que contiene al menos un 4% de otros ingredientes, además de sulfitos, colorantes y otros aditivos para mejorar el sabor y la conservación del producto.