Alerta de aceite de oliva: estas son las marcas que debes evitar comprar con especial atención a esta fecha
Conocer la frescura, el origen y la calidad del aceite es clave para aprovechar sus beneficios y evitar situaciones complicadas.
El aceite de oliva es un símbolo de la dieta mediterránea, reconocido no solo por sus beneficios para la salud sino también por su capacidad para realzar cualquier plato. Pero, ¿cómo se asegura el consumidor de que el aceite de oliva que compra es de buena calidad? A la hora de elegir el mejor, los expertos recomiendan prestar atención al origen, la fecha de cosecha y su conservación. Estas características determinan si el producto aporta todos sus beneficios o si, por el contrario, puede estar perdiendo calidad.
La importancia del origen y la producción ecológica
Para garantizar la calidad, lo primero que se debe hacer es verificar el origen del aceite de oliva. Escoger uno de procedencia conocida, especialmente si es ecológico, asegura que el producto cumple con los estándares específicos de cada tipo de producción y ayuda a mantener sus propiedades intactas. Igualmente, el color varía según la maduración de las aceitunas, siendo el verde un indicio de aceitunas recolectadas tempranamente, mientras que el dorado sugiere una cosecha más tardía.
La fecha de cosecha, un indicador de frescura
El nivel de frescura es un factor clave para saber si un aceite de oliva está en buen estado y la fecha de recolección es fundamental. Un producto recién elaborado retiene un sabor afrutado y un retrogusto ligeramente picante, característico de los aceites de primera calidad. Mantener el aceite en óptimas condiciones depende también de como se guarda en casa. Es preferible usar botellas oscuras, ya que protegen el contenido de la luz solar y del calor, factores que aceleran su degradación.
Una vez en casa, es esencial evitar que el aceite de oliva se guarde en la nevera. Las bajas temperaturas pueden solidificarlo y provocar grumos que reducen nutrientes y alteran su textura. Además, una sobreexposición al aire y la humedad también pueden afectar su sabor y valor nutricional. Los expertos aconsejan consumirlo con moderación, ya que, aunque es saludable, un consumo excesivo podría no resultar beneficioso para todos, y algunas personas podrían experimentar reacciones adversas.
Qué evitar y recomendaciones de compra
Para asegurarse de elegir un buen aceite de oliva, lo ideal es acudir a frantoi o molinos especializados, donde la trazabilidad del producto está garantizada y se puede adquirir aceite recién extraído y de calidad. Además, se recomienda optar por marcas reconocidas y leer detenidamente la etiqueta para comprobar tanto el origen como la fecha de recolección. Estas indicaciones ayudarán a los consumidores a evitar productos de baja calidad y a disfrutar de los beneficios completos del auténtico aceite de oliva.