Un veterinario lanza una alerta por golpe de frío en perros y gatos: esta es la temperatura límite
En el caso de los perros, ha recomendado un ligero cambio en la dieta.
Entrado de lleno ya el invierno, no sólo los humanos han de protegerse adecuadamente del frío, los más peludos, también. Ha sido precisamente en esta línea en la que va el consejo del veterinario Stefano Cattinelli que ha compartido la revista italiana FQ Magazine.
Señalan que, al estar acostumbrados a vivir en interior, los animales domésticos no siempre reaccionan de manera positiva a las bajas temperaturas. Su temperatura basal es de alrededor de 38,5ºC, afirman, aunque hay distintos motivos que pueden hacer que su tolerancia sea menor o mayor.
En el caso de los gatos, el medio italiano destaca que, si son de no salir de casa, no hay mucho problema. Ahora bien, hay hogares en los que dan total libertad a sus mininos para que paseen por la calle y, cuando al animal le plazca, vuelva.
Por norma general, cuando empieza el descenso de temperaturas en otoño, es habitual que los gatos empiecen a comer más con la finalidad de espesar la capa de grasa que tienen bajo la piel para que les proteja del frío. Ahora bien, si la temperatura exterior desciende de los 5ºC, conviene dotarlos de una protección extra.
En cualquier caso, consideran que lo más probable que puede suceder es que, si el gato siente excesivo frío, vuelva corriendo a su casa. Lo que si recomiendan, de todas de las maneras, es evitar que estos abandonen el hogar las noches de invierno.
Sobre los perros, el límite de resistencia temperatura, dicen, varía en función de las razas. El veterinario consultado por FQ Magazine destaca que hay perros que están más preparados para el frío, como el husky siberiano, que otros. Pero el consejo lo ha lanzado para todos: "Cuando salgamos a pasear -preferiblemente a mitad del día, es buena idea dejar que el perro se mueva".
Insta a cuidar las patas de los peludos y limpiar las almohadillas de estas, por si entran en contacto con la sal que se esparce por las ciudades para evitar que se hielen los suelos. "Sin duda es útil complementar la dieta con fuentes de grasas como aceite de pescado, mantequilla, aceite de oliva, aceite de maíz, aceite de linaza o aceite de maní", ha apostillado el experto.