Los seis animales que mueren por sexo
Nacer, crecer, reproducirse y morir son las cuatro fases vitales de todo ser vivo, aunque para algunas las dos últimas pueden ir seguidas.
Nacer, crecer, reproducirse y morir. Las cuatro fases vitales de todo ser vivo. Aunque para algunos animales las dos últimas pueden ir seguidas. Así lo ha reportado la revista National Geographic.
Según la revista, hay un grupo de animales que la primera vez que proceden a aparearse es también la última. Estos son algunos de ellos:
La mantis religiosa
Este dato está de sobra extendido. Una vez se lleva a cabo el proceso, la hembra devora al macho. Lo hace empezando por la cabeza. Aunque, según la revista, este podría sobrevivir.
"Depende básicamente del factor sorpresa", explican desde National Geographic. Si el macho consigue huir antes de la hembra lo sujete una vez realizada la fecundación, es probable que salga con vida.
Los peces abisales
Las hembras de este tipo de animales presentan una particularidad: son hasta diez veces más grandes que los machos. Además, su sistema de apareamiento es también peculiar.
Los machos tienen un único propósito en su vida: encontrar una fémina y morderla. A partir de ese momento, no se van a soltar de ella nunca. Hasta tal punto que su organismo se fusiona con el de la hembra en cuestión. De esta manera, el macho termina por atrofiarse hasta convertirse en un recipiente de espera, detalla la revista.
Entonces, cuando la hembra decide que ha llegado el momento de procrear, únicamente ha de emplear las reservas de esperma que ha dejado el macho.
Las chinches
El sistema de reproducción de estos animales consiste en apuñalar a sus iguales. De esta manera, les inyectan el material genético correspondiente para el apareamiento.
Los salmones
La mayoría de las diversas especies de salmón que existen únicamente se aparean una vez. De hecho, una vez se reproducen por primera vez, mueren. Ello se debe a que invierten una gran cantidad de tiempo y energía en recorrer los ríos hasta llegar al lugar en el que se produce el desove.
El pato de collar
En época de apareamiento, los machos de esta especie se vuelven bastante violentos. Tanto que, a diferencia de lo que hacen otras aves, omiten el proceso de seducción. Si localizan una posible pareja, se lanzan a por ella.
El antequino pardo
Cuando los machos alcanzan su primera época de celo, entran en una fase de frenesí reproductivo. Entonces, tratan de aparearse con el máximo de hembras posibles. Durante todo este proceso no comen y producen una gran cantidad de hormonas del estrés. Por lo tanto, su sistema inmunitario se ve muy debilitado y terminan muriendo.
En cuanto a las hembras, tampoco viven mucho más. Suelen fallecer al dar a luz a la primera camada.