La triste realidad del animal más rápido del mundo

La triste realidad del animal más rápido del mundo

A pesar de su poder y belleza, este mamífero se enfrenta a numerosos desafíos.

Vaughan Jessnitz logró captar a un guepardo parado frente a una señal de limitación de la velocidad.VAUGHAN JESSNITZ / BARCROFT IMAGES

El guepardo, conocido científicamente como Acinonyx jubatus, enfrenta una lucha constante por su supervivencia. Este felino, el más rápido del mundo terrestre, se encuentra en un estado crítico de conservación, con menos de siete mil ejemplares en libertad a partir del año 2020. Su existencia está amenazada principalmente por la reducción drástica de su hábitat y la disminución de sus poblaciones en más del 50% en los últimos veinticinco años.

Es un depredador diurno que utiliza su impresionante velocidad, alcanzando hasta 104 km/h, para cazar. Sin embargo, esta capacidad también lo hace vulnerable, ya que su cuerpo no está diseñado para resistir largas persecuciones, lo que le obliga a abandonar la caza si no alcanza a su presa en unos 400 metros. Además, su anatomía especializada para la velocidad, con garras semi-retráctiles y una musculatura adaptada para carreras cortas y explosivas, lo hace menos capaz en la lucha y defensa contra otros depredadores.

Los guepardos son animales solitarios, aunque a veces forman pequeñas manadas, lo que incrementa sus posibilidades de supervivencia. La reproducción de los guepardos también es un desafío, ya que solo uno de cada diez cachorros alcanza la edad adulta debido a la depredación y otros peligros naturales.

La singularidad del guepardo no solo reside en su velocidad. Posee una vista excepcional que le permite detectar a sus presas a larga distancia y una cola larga que le proporciona estabilidad durante la persecución. Sus características físicas, como una región lumbar larga y musculosa, contribuyen a su flexibilidad y capacidad para realizar zancadas extensas.

A pesar de su poder y belleza, el guepardo enfrenta numerosos desafíos. La pérdida de hábitat debido a la expansión humana y la caza furtiva son amenazas constantes. Además, la baja diversidad genética de la especie, resultado de cuellos de botella genéticos históricos, ha dejado a los guepardos vulnerables a enfermedades y cambios en su entorno.

La conservación del guepardo es crucial no solo para la supervivencia de la especie, sino también para el equilibrio de los ecosistemas donde habita. Esfuerzos de conservación están en marcha para proteger a estos majestuosos animales, pero se necesita un compromiso global para asegurar su futuro en la naturaleza.