Una fragata española sale al paso de un submarino ruso
La Armada ha tenido que actuar hasta en dos ocasiones en los últimos siete días para controlar los movimientos de la embarcación.
La Armada española se ha visto obligada a actuar en aguas cercanas al golfo de Cádiz tras un movimiento inesperado por parte del submarino ruso Ufa, que navegaba junto a su buque que le servía de apoyo logístico.
Según informan desde la Armada, la fragata española F-81 Santa María -que se echó al mar el pasado 15 de diciembre- ha sido la encargada de seguir muy de cerca los movimientos del submarino ruso, con el objetivo de controlar el paso de este por aguas españolas. Esta operación se llevó a cabo en coordinación con la OTAN y los países aliados.
Pero este no ha sido el único momento de cierta tensión en aguas españolas, ya que el submarino ruso estuvo presente en la costa gallega durante la semana pasada, lo que provocó que la Armada tuviera que movilizar al patrullero Centinela entre el 12 y el 14 de diciembre en el Cantábrico.
Tras unas horas y debido al rumbo descendente que tomó la embarcación rusa, llegó el turno de la Marina portuguesa, y posteriormente de nuevo a España -con la Fragata F-81 Santa María-, una vez que atravesó toda la península por el océano y tras llegar al límite de la Zona Económica Exclusiva Atlántica.
La 'persecución' continuó por las aguas del Estrecho de Gibraltar y el mar de Alborán hasta que las dos embarcaciones rusas dejaron atrás aguas españolas. Este seguimiento ha corrido a cargo del Mando de Operativo Marítimo, en el marco de las operaciones de Presencia, Vigilancia y Disuasión.