Un nuevo país rompe con Rusia: "Eso es todo"
Y a Putin no le gusta nada porque, además de darle esquinazo, busca el abrigo de Europa.
Moldavia está cortando gradualmente sus lazos con el Kremlin y volviéndose hacia Occidente. Hace apenas 20 años, la mitad de los bienes producidos en este país iban a Rusia. Hoy, la Federación representa sólo alrededor del 3,5%. Los contactos se han ido debilitando, para enfado doble de Vladimir Putin, porque, además, el país ha apostado por completo por el oeste, por alinearse con Europa, hasta el punto de pedir la adhesión a la Unión.
"Así que eso es todo", escribe, resumiendo la situación, Kamil Całus, analista del Centro de Estudios Orientales de Polonia (OSW), en la red social X (antiguo Twitter). Moldavia, dice, ya no depende oficialmente del comercio con Rusia, y por lo tanto ya no es susceptible al chantaje económico ruso.
El experto explica que en los últimos 20 años Chisinau se ha ido liberando gradualmente de su dependencia de las exportaciones al mercado ruso. "Mientras que en 2004 la mitad de los bienes producidos por este país iban a Rusia (y la otra mitad a la UE), en los años siguientes el dominio del mercado comunitario sobre el ruso se hizo innegable (incluso absurdamente gigantesco). Hoy en día, Rusia representa sólo alrededor del 3,5% de las exportaciones moldavas", subrayó.
El analista de la OSW señala que esta situación ha sido provocada por el propio Moscú, que, en respuesta a las reformas proeuropeas introducidas por Chisinau, castigó sucesivamente a Moldavia con un embargo sobre determinadas categorías de productos.
Pero ese no es el final. "A partir de 2023 no se hablará de dependencia de las importaciones de Rusia. Hasta hace poco, aproximadamente entre el 12 y el 16% de los bienes importados por Moldavia procedían de este país. Hoy en día es sólo el 3,7%. Hoy, Polonia tiene exactamente la misma proporción de productos moldavos. importaciones (pero nunca hemos sido un mercado de importación clave para Chisinau y apenas estamos construyendo nuestra posición)", destacó Całus.
"Esta disminución, como en el caso de las exportaciones, también se debe a las acciones de Rusia, que fue demasiado lejos con el chantaje del gas, obligando a Moldavia a independizarse finalmente del suministro de combustible azul de Gazprom a finales de 2022. El gas fue una parte clave de las importaciones moldavas desde Rusia. Felicitaciones, Moldavia", concluyó el analista.
Recordemos que la independencia de Moldavia del gas ruso fue posible gracias a la conexión del país al interconector que conecta los sistemas de transporte de Bulgaria y Grecia (IGB).
Moscú no quiere renunciar a Moldavia y aumenta la presión
Moscú trata a Moldavia como su esfera de influencia. La presión económica del Kremlin tenía como objetivo bloquear los procesos de integración de Chisinau con la Unión Europea. Sin embargo, estas acciones tuvieron el efecto contrario. Chisinau está cada vez más vinculada económicamente a la Unión Europea. Además, el país ha obtenido el estatus de candidato oficial a la Unión Europea y, al igual que Ucrania, comenzará las negociaciones de adhesión en junio.
Hay más. El Kremlin, que no tiene las herramientas económicas adecuadas para retener a Moldavia, está tratando de influir en este país a través de centros separatistas. Uno de ellos es Transnistria, que de facto se separó de Moldavia a principios de los años 1990. La tarea de la separatista Transnistria durante los últimos 30 años ha sido influir en Moldavia, especialmente durante los períodos en que los políticos proeuropeos llegaron al poder en Chisinau y querían ir más allá del espacio geopolítico de influencia de Moscú.
Un ejemplo de tales acciones fueron las reclamaciones de Gazprom contra Moldavia por las facturas de gas de los residentes de Transnistria, lo que aumentó la deuda de Chisinau con el gigante energético. Esta deuda con Gazprom se estimó en aproximadamente 9 mil millones de dólares a finales de 2022.
Moldavia está en los planes expansionistas de Putin y tiene quien colabora en complicar las cosas. En una entrevista con TASS, el presidente de Transnistria, Vadim Krasnoselski, afirmó que la "militarización" de Moldavia amenaza a su territorio. También acusó a Chisinau de suspender las negociaciones con Transnistria y destacó la importancia de la cooperación de los separatistas con Rusia.
A su vez, el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Mijaíl Galuzin, destacó que las autoridades moldavas se esfuerzan por transformar la república en un "trampolín antirruso" siguiendo el ejemplo de Ucrania.
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