Un experto en seguridad da la predicción más sombría sobre una guerra global contra Rusia: "Antes de lo que pensamos"

En el escenario global marcado por la guerra rusa de Ucrania, iniciada por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, en febrero de 2022, muchos países europeos se rearman y preparan sus defensas ante el peligro de que el conflicto se extienda a sus territorios. En este contexto, el experto en políticas de seguridad Edward Lucas ha lanzado una sombría predicción sobre el futuro de la guerra rusa. 

"He visitado Praga, Riga y Varsovia en las últimas semanas. El ambiente en estos estados de primera línea es sombrío. La guerra es probable y antes de lo que pensamos. Suponiendo que Rusia lleve a Ucrania a un punto muerto, las fuerzas del presidente Vladimir Putin podrían estar listas para una guerra mayor en dos años o incluso menos", ha afirmado Lucas, que trabaja como investigador en el centro de estudios del Centro de Análisis de Políticas Europea, según ha publicado el medio Verkkouutiset. 

Aunque todo el mundo espera que la OTAN actúe y que Estados Unidos acuda al rescate, según Lucas, ya pocos lo creen. En su opinión, Gran Bretaña, como muchos otros países occidentales, está escandalosamente mal preparada para esta situación. Finlandia, que ha invertido a largo plazo en su defensa nacional general, Estonia, que gastará una cuarta parte de su presupuesto de defensa en municiones el próximo año, y Polonia, cuyas fuerzas armadas, según él, han llegado a la cima de Europa. 

Según Lucas, Finlandia, Estonia y Polonia son ejemplos de países que comprenden la amenaza existencial que representa Rusia e incluso lucharían solos contra ella si fuera necesario. Y "puede que tengan que hacerlo", advierte el experto.

"Los ucranianos pagarán por nuestra negligencia. No pueden defender sus desmoronadas líneas del frente y sus maltrechas ciudades contra un ataque ruso porque la ayuda estadounidense llega demasiado poca, demasiado tarde y con restricciones que les impiden atacar las bases aéreas y concentraciones de tropas de los atacantes", señala.

Occidente ha tenido la oportunidad de luchar contra el imperialismo del Kremlin junto a una Ucrania grande, fuerte y unida, según agrega el experto. Sin embargo, "como teníamos miedo de los riesgos y costos de brindar ayuda militar real, no aprovechamos la oportunidad. Ucrania nos dio tiempo para construir nuestra propia defensa, pero también lo desperdiciamos", afirma.

Según él, una Ucrania derrotada, desesperada y traumatizada se convertiría en un problema gigantesco para toda Europa. "Mientras tanto, nuestra seguridad y nuestra libertad se basan en el frágil supuesto de que la próxima administración de los Estados Unidos se preocupa más por nuestra seguridad que nosotros", resume Lucas.