La UE cierra un acuerdo clave para el reparto en la acogida de refugiados: fija cuotas y multas para el país que no cumpla
El pacto ha salido adelante pese a la negativa de Hungría y Polonia y las abstenciones de otros cuatro socios comunitarios.
Fumata blanca entre los Veintisiete por el reparto de los migrantes irregulares en territorio comunitario. Los ministros de Interior de la Unión Europea han alcanzado un acuerdo para establecer un mecanismo que garantice el reparto y descargue de la mayor presión migratoria a los países más afectados.
Como indica Europa Press, no es el 'final del camino', pero sí sienta las bases para gestionar un asunto que amenazaba con cronificarse en Bruselas tras años de tiras y aflojas. Así, el pacto entre los estados miembro deberá concretarse con la negociación de una versión definitiva de los reglamentos el control y el procesamiento del asilo con el Parlamento Europeo.
De momento, los ministros han fijado los criterios y umbrales que quieren que se apliquen a la hora de activar un mecanismo de "solidaridad flexible" que obligará a los demás países a reaccionar cuando uno de los socios se vea desbordado con la llegada de migrantes, ya sea reubicando en su territorio a parte de las personas llegadas o pagando una compensación tasada por cada reubicación que rechace.
La fórmula acordada establece una reubicación de un mínimo de 30.000 migrantes cada año y una contribución financiera de al menos 600 millones de euros anuales a la reserva de solidaridad de aquellos gobiernos que no acepten dar asilo a la parte que les corresponda, lo que en la práctica supone que deberán pagar una compensación de 20.000 euros por cada traslado rechazado. La propuesta prevé también como alternativa una aportación en material útil para la gestión y control de los flujos a la altura del valor de la compensación estimada.
La última en dar su brazo a torcer ha sido Italia. El Gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni había mostrado sus reservas con respecto a las condiciones para deportes a los migrantes sin derecho de asilo, pero finalmente ha aceptado el sentido mayoritario. Sólo Hungría y Polonia han votado en contra y además se han registrado cuatro abstenciones, las de Bulgaria, Malta, Eslovaquia y Lituania por no estar satisfechos.
"Unidos somos más fuertes"
"Hoy hemos dado un gran paso para dotar a Europa de un sistema de asilo y migración más eficaz, más solidario y más justo", ha afirmado el titular español, Fernando Grande-Marlaska, durante la reunión del Consejo de Ministros del Interior celebrada en Luxemburgo.
"Muchas gracias por este amplio apoyo", ha dicho la ministra sueca de Interior y presidencia de turno de la UE, Maria Malmer, tras constatar que se daba la mayoría cualificada necesaria para dar luz verde a los textos sobre la mesa, tras una jornada de negociaciones entre ministros. "Somos mucho más fuertes cuando trabajamos unidos", ha celebrado, por su parte, la comisaria de Interior y promotora de la reforma, la socialista sueca Ylva Johansson.
La migración ha sido mucho tiempo un tema "tóxico" y bloqueado la reforma durante más de siete años por las enormes diferencias entre los gobiernos, ha recordado en una rueda de prensa al término de la negociación en Luxemburgo la comisaria Johansson, para quien este jueves es un día "histórico" aunque queda por delante la negociación con la Eurocámara, que insiste en introducir cuotas obligatorias de reubicación.