Ucrania cambia radicalmente su estrategia
E invertirá la mitad de sus presupuestos generales en la guerra.
Ucrania se prepara para un invierno de duros combates defensivos invirtiendo la mitad del gasto público en pertrechar a su Ejército. Del mismo modo, su enemigo Rusia incrementa en dos tercios su presupuesto en defensa y seguridad.
"Los fondos existen y todas las decisiones están tomadas. Ahora debe hacerse el trabajo correspondiente sobre el terreno. Todo está perfectamente detallado. Hay minas y cemento suficientes" para fortificar, aseguró el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
La partida de gastos de Ucrania contempla cerca de 90.000 millones de dólares, la mitad de los cuales se destinará a defensa. El gasto total ucraniano es inferior a los recursos que Rusia destinará el próximo año solo a defensa, que totalizarán 10,4 billones de rublos (alrededor de 111.000 millones de dólares).
Objetivo: reforzar las fortificaciones
Zelenski señaló que "se necesita más rapidez y efectividad" en el refuerzo de las fortificaciones y recalcó que todos los responsables "tienen tareas claras". Precisamente en las tareas defensivas centró presidente ucraniano su visita hoy a la región sureña de Odesa, a orillas del mar Negro, donde abordó con los mandos militares la defensa de sus puertos e infraestructuras para la exportación de grano.
La ciudad de Odesa, la capital regional, fue atacada este verano casi a diario con drones y misiles en la campaña de bombardeos contra las capacidades de exportación agrícola de Ucrania. Aunque en las últimas semanas las tropas de Moscú han intensificado los ataques contra las posiciones ucranianas, sobre todo el frente oriental, y aparentemente han recuperado cierta iniciativa, el ministro de Exteriores ucraniano, Dmitró Kuleba, ha dicho en Bruselas que no hay un "estancamiento" en la respuesta de Kiev a la invasión rusa.
La OTAN resalta la debilidad de Rusia
Sin embargo, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró hoy que Rusia "ha retrocedido", ahora es "más débil política, militar y económicamente" y "cada vez depende más de China". "Año tras año, Moscú hipoteca su futuro a Pekín. Militarmente, Rusia ha perdido una parte sustancial de sus fuerzas convencionales: cientos de aviones, miles de tanques y ha tenido más de 300.000 bajas", subrayó.
Stoltenberg indicó que no puede dar la fecha exacta de la entrega a Ucrania de aviones de combate F-16, pero expresó su esperanza de que comenzará lo antes posible. Advirtió de que es necesario entender que los F-16 por sí solos no pueden "cambiar fundamentalmente la situación en el campo de batalla".