Por favor, habilita JavaScript para ver los comentarios de Disqus.
'The Atlantic' publica la conversación completa sobre el bombardeo en Yemen: hora, objetivos y aviones

'The Atlantic' publica la conversación completa sobre el bombardeo en Yemen: hora, objetivos y aviones

"La gente debería ver los mensajes para sacar sus propias conclusiones", afirma el director del medio, Jeffrey Goldberg.

Yemeníes inspeccionan el lugar alcanzado por un ataque aéreo estadounidense el domingo por la noche y que dejó un transeúnte muerto y otros cinco heridos.Getty Images

La revista The Atlantic ha publicado íntegramente la conversación mantenida en un chat de Signal en el que altos funcionarios de la Administración de Donald Trump hablaron sobre ataques inminentes en Yemen. Una filtración que ha generado una controversia sobre la seguridad de la información y el manejo de datos sensibles en el Gobierno estadounidense.

El director del medio estadounidense, Jeffrey Goldberg, quien fue incluido por error en la conversación de Signal, junto con su colega Shane Harris, desmiente este miércoles las declaraciones de las autoridades estadounidenses que afirmaban que los mensajes contuvieran "planes de guerra" o "información clasificada".

El secretario de Defensa de EEUU, Pete Hegseth, había dicho que "nadie enviaba mensajes de texto con planes de guerra". "Y eso es todo lo que tengo que decir al respecto", añadió. Una idea ratificada por la directora de inteligencia nacional, Tulsi Gabbard, y el director de la CIA, John Ratcliffe.

"No se compartió ningún material clasificado en ese grupo de Signal", señaló Gabbard, mientras que Ratcliffe sostuvo que sus mensajes "eran totalmente permisibles y legales y no incluían información clasificada". El propio presidente de EEUU, Donald Trump, realizó declaraciones en la misma línea: "No era información clasificada".

"Existe un claro interés público"

"Estas declaraciones nos plantearon un dilema", comenta en su artículo Goldberg, quien especifica que recibió información sobre los ataques dos horas antes de que se iniciaran los bombardeos, lo que, en manos equivocadas, habría podido poner en grave riesgo a las fuerzas estadounidenses.

Por ello, en un principio, no quiso publicar la "información específica relacionada con las armas y el momento de los ataques" que había en algunos mensajes. "Es por eso que elegimos caracterizar la naturaleza de la información que se comparte, no detalles específicos sobre los ataques", argumenta.

Sin embargo, las declaraciones de Gabbard, Ratcliffe y Trump le hicieron cambiar de opinión: "Nos han llevado a creer que la gente debería ver los textos para llegar a sus propias conclusiones". 

"Existe un claro interés público en revelar el tipo de información que los asesores de Trump incluyeron en canales de comunicación no seguros, especialmente porque altos funcionarios de la administración están tratando de minimizar la importancia de los mensajes que se compartieron", añade.

Los mensajes

El mensaje de Hegseth comienza a las 11:44 con las siguientes palabras: "ACTUALIZACIÓN DEL EQUIPO". A continuación podía leerse: "AHORA (1144et): El clima es FAVORABLE. Acabo de CONFIRMAR con CENTCOM que estamos listos para el lanzamiento de la misión". 

"1215ET: LANZAMIENTO de F-18 (1er paquete de ataque)", continúa, antes de detallar: "1345: Comienza la ventana de primer ataque del F-18 'basado en gatillos' (el terrorista objetivo es @ su ubicación conocida, por lo que DEBERÍA ESTAR A TIEMPO, también, lanzamiento de drones de ataque (MQ-9s)"

Este mensaje de Signal revela que el secretario de Defensa de EEUU envió un mensaje a un grupo que incluía un número de teléfono desconocido para él, el de Goldberg, a las 11:44 horas, 31 minutos antes de que los primeros aviones de combate estadounidenses despegara, y dos horas y un minuto antes de que se iniciara el período en el que se esperaba que un "objetivo terrorista" hutí fuera eliminado por esos aviones.

El mensaje de Hegseth continúa con más detalles:

  • "1410: Lanzamiento de más F-18 (2º paquete de ataque)"
  • "1415: Ataque de drones en el objetivo (AQUÍ ES CUANDO DEFINITIVAMENTE CAERÁN LAS PRIMERAS BOMBAS, a la espera de los objetivos anteriores 'Basados en Gatillos')"
  • "1536 F-18 2nd Strike Starts. También, se lanzaron los primeros Tomahawks basados en el mar".
  • "MÁS POR SEGUIR (por línea de tiempo)"
  • "Actualmente estamos limpios en OPSEC", es decir, en la seguridad operativa.
  • "Buena suerte a nuestros Guerreros".

Aunque Hegseth no incluye todos los detalles del plan de bombardeo ni identifica de forma precisa los objetivos, menciona el armamento que se utilizará y proporciona los minutos exactos de la operación, información que usualmente se mantiene en secreto militar para evitar que el enemigo pueda reaccionar.

Las autoridades insisten en que no hay confidencialidad

Goldberg asegura que su revista ha contactado recientemente con varias agencias e instituciones para aclarar las dudas sobre la confidencialidad de los mensajes. 

La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, les ha comunicado que "no había información clasificada en el grupo de chat", aunque ha subrayado que no apoyan la difusión del contenido, el cual, según explicó, formaba parte de una "deliberación interna y privada" sobre "información sensible".

Leavitt también ha reaccionado en redes sociales a la última publicación de la revista, sugiriendo que The Atlantic estaría reconociendo que no se trataba de "planes de guerra", aludiendo a un titular que hablaba de "planes de ataque". Ha calificado todo esto como un "fraude" elaborado por los detractores del presidente Trump.

El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Mike Waltz, quien asumió la responsabilidad por el error, ha reafirmado que "no eran planes de guerra" y ha asegurado que "los socios internacionales de Estados Unidos ya habían sido informados sobre los bombardeos inminentes". Por su parte, el vicepresidente estadounidense, JD Vance, apunta que está "muy claro" que Goldberg "exageró lo que tenía".

Hegseth, demandado por su uso de la plataforma

 Pete Hegseth, ha sido demandado este miércoles por utilizar la aplicación de mensajería Signal para discutir "planes de guerra". El secretario de Defensa de Estados Unidos participó en un polémico chat de Signal con otros altos funcionarios del Gobierno de Donald Trump.

La demanda fue interpuesta ante la corte del Distrito de Columbia por American Oversight, una organización sin ánimo de lucro y no alineada con ningún partido que vigila al Gobierno. En este sentido, la entidad alega que el equipo del presidente violó la Ley de Registros Federales y la Ley de Procedimiento Administrativo al compartir esa información a través de dicha aplicación de mensajería, que autodestruye los mensajes.

La demanda pretende impedir que se sigan destruyendo ilegalmente archivos federales y obligar a recuperar estos documentos mediante el uso no autorizado de Signal.

Además de Hegseth, están citados en la demanda el secretario de Estado, Marco Rubio; la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard; el director de la CIA, John Ratcliffe; y el secretario del Tesoro, Scott Bessent, que también estaban en el chat grupal.

El juez federal asignado al caso será James Boasberg, con quien el Gobierno libra un enfrenamiento después de que bloqueara la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 y ordenara el regreso de vuelos con migrantes venezolanos enviados a El Salvador, una orden que el Ejecutivo no acató.