Surinam manda al chatarrero sus patrulleros españoles
El Ministerio de Defensa ha comunicado la decisión de deshacerse definitivamente de las embarcaciones tras dos décadas.
El país sudamericano ha tomado una decisión tan polémica "como necesaria" respecto a los patrulleros españoles que tenían en propiedad desde hace dos décadas. En el año 2000 el gobierno de Surinam se hizo con ocho patrulleros -tres tipo 101 y cinco tipo 55- para su Marina, que con el paso de los años y después de atravesar diferentes etapas, han sido definitivamente destruidos debido a su inoperancia.
Según informó el Ministerio de Defensa del país a través de una nota de prensa, se han desmantelado parte de estos patrulleros, como consecuencia de su estado e ineficiencia desde 2016.
En el comunicado se especifica que los patrulleros se hallaban "amarradas a lo largo del Canal Saramacca en marzo de 2016 y puestas bajo la administración de la empresa privada Hi-Q Oil Surinam NV, cayendo en un estado deplorable con el tiempo".
También añadieron que el proceso de destrucción y eliminación de los patrulleros se ha llevado a cabo de una forma "respetuosa con el medio ambiente", procediendo al enterramiento de sus piezas debido a que "ya no tenían ningún valor económico". Además, apuntan que dificultaban el paso de otros barcos a través del Canal, suponiendo también una amenaza para el medio ambiente.
Los patrulleros, bajo sospecha
Pese a no haber trascendido el número de patrulleros eliminados, se cree que puede tratarse de tres de los cinco que tenía bajo su poder la empres Hi-Q, una opción que gana enteros tras confirmarse en 2021 que se desconocía el paradero de los otros tres, que según informaron, "fueron subastados en el año 2018" por el gobierno anterior.
Estas subastas se produjeron de forma irregular según una investigación llevada a cabo por el actual gobierno, que concluyó en el año 2021, y que señaló que cinco de las ocho embarcaciones fueron entregadas a Jerrel van Embricqs, de Hi-Q Oil de forma ilegal por el anterior Ministro de Defensa, Ronni Beschop, a través de un "trato verbal" sin que "conste ninguna asignación ni venta".
Por todo esto, desde el Gobierno surinamés se ha optado por desechar de manera definitiva parte de esos patrulleros sin dejar rastro y facilitando a partir de ahora la circulación de todas las embarcaciones por el Canal Saramacca.