Rusia hace saltar todas las alarmas en Nueva Zelanda
El NZIS afirma las acciones de espionaje e injerencia extranjera "en y en contra" el país oceánico.
Un nuevo capítulo de espionaje se abre en el marco internacional. Los servicios de inteligencia de Nueva Zelanda han denunciado este viernes la "injerencia extranjera" de China y Rusia que puede causar un "daño significativo" a la seguridad nacional. El objetivo de estos espionajes sería robar secretos militares, derechos propiedad intelectual e incluso, apuntan, datos personales.
El Servicio de Inteligencia de Seguridad de Nueva Zelanda—conocida como NZSIS— ha afirmado que conoce de las acciones de espionaje e injerencia extranjera "en y en contra" el país oceánico que están vinculados a los servicios de inteligencia de Pekín. Se trata de la primera evaluación exhaustiva que hacen sobre las amenazas que afronta nueva Zelnda como el terrorismo, la injerencia extranjera y el espionaje.
"La posición geográfica de Nueva Zelanda en el Indopacífico, nuestros vínculos con otros países del Pacífico y nuestros intereses compartidos en una región estable, próspera y resiliente atraerán la atención de servicios de inteligencia extranjeros", detalla el documento publicado, que apunta también que las campañas de desinformación rusas han aumentado tras la invasión a Ucrania. Existe una cierta preocupación por la seguridad y estabilidad de la estratégica región del Pacífico.
Según NZIS, la intromisión extranjera que da pie a las actividades "maliciosas" tienen como blanco "injustificado", a la comunidad de inmigrantes y aquellas comunidades consideradas disidentes por algunos gobiernos extranjeros.