Rusia estrena los misiles de invierno
Todo indica que se trata de una campaña contra las infraestructuras energéticas ucranianas.
La Inteligencia militar británica considera que la gran ola de ataques lanzados por Rusia el 7 de diciembre contra Kiev y el centro de Ucrania representan el comienzo de una nueva campaña contra la infraestructura energética ucraniana con la llegada del invierno.
El Ministerio de Defensa británico describe los ataques rusos del jueves como los primeros con bombarderos pesados desde el 21 de septiembre, posiblemente aparatos Tu-95 BEAR H, que dispararon al menos 16 misiles crucero "desde su habitual zona de operaciones sobre el mar Caspio", según Europa Press.
"Probablemente, se trataba de misiles AS-23a KODIAK, los preferidos de Rusia", según la valoración del Ministerio de Defensa publicada este domingo, que da prácticamente por sentado que el Ejército ruso se ha pasado las últimas semanas acumulando esta clase de proyectiles "para su uso en la campaña invernal".
Por ello, la Inteligencia británica ha considerado estos ataques como "el comienzo de una campaña más concertada con el objetivo de degradar la infraestructura energética de Ucrania".
Reino Unido, no obstante, toma nota de las informaciones del Ejército ucraniano sobre la "intercepción exitosa, a pesar de la muerte de un civil, de la mayoría de estos misiles". "El daño (material) parece haber sido mínimo", ha agregado Londres.