Rusia ahuyenta a su mejor cliente bélico

Uno de los mejores pagadores de Rusia en materia de compra de armamento militar está mirando con recelo a Moscú por la carambola derivada de su invasión a Ucrania. Tanto por el uso que se le están dando a esas armas en dicha guerra, como por las consecuencias derivadas de estas.

Se trata de una cuestión de máxima importancia, porque además de representar a uno de los mayores aliados de la Federación rusa, si gira la mirada a suministradores occidentales se trataría de un doble impacto negativo para la economía rusa.

Los motivos detrás de este alejamiento por parte del cliente ruso pasan por múltiples motivos, según recoge el medio Politico. Se conjugan desde las sanciones occidentales a las exportaciones rusas, pasando por las preocupaciones de la calidad del equipo ruso y la intención -o más bien necesidad- de desarrollar una industria de defensa local en dicho país.

Una bajada progresiva de ventas

Hablamos de India, el mismo país que en la última década desembolsó la friolera de 60 mil millones de dólares en compras de armamento bélico a Rusia, según datos del último informe del Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo. 

Pero esa dinámica ha ido cambiando, presumiblemente, por los factores antes descritos. Para hacerse una idea, esas compras pasaron del 76% en el período 2009-2013 a solo el 36% en el último lustro.