Putin pierde un soldado cada 49 segundos en su día más sangrante de todo el conflicto

Putin pierde un soldado cada 49 segundos en su día más sangrante de todo el conflicto 

El Ministerio de Defensa ucraniano hizo esta afirmación al destacar la cifra de los 1.770 soldados rusos quex, según aseguran, murieron el pasado domingo.

Soldados ucranianos se defienden de las tropas rusas diparándo contra ellas cerca de Toretsk.Diego Fedele/Getty Images

El Ministerio de Defensa de Ucrania ha afirmado que Rusia perdió soldados a un ritmo de uno cada 49 segundo en el día más sangriento de la guerra, ofreciendo una cruda ilustración del enorme coste humano de la invasión de Vladimir Putin. El Ministerio ucraniano hizo esta afirmación al destacar la cifra de los 1.770 soldados rusos que, según aseguran, murieron el pasado domingo. 

Al compartir las cifras a través de su cuenta de X, el Ministerio agregó: "Es el número diario más alto desde el comienzo de la invasión a gran escala. Cada 49 segundos, Rusia pierde un soldado. Hacemos que los ocupantes paguen el precio más alto por su brutal invasión". 

Pero la cifra de fallecidos entre las tropas rusas del pasado lunes es, incluso, más alta: 1.950. En total, las supuestas pérdidas de personal ascienden a 712.610 personas, además de grandes cantidades de equipo militar, incluidos 9.276 tanques, 18.847 vehículos blindados de combate y 20.352 sistemas de artillería, según señala el medio Express

Desde que Rusia lanzó su invasión a gran escala de Ucrania en febrero de 2022, sus pérdidas militares han sido significativas en términos de personal, equipo y moral pública. Aunque es difícil verificar cifras precisas, estimaciones de fuentes occidentales sugieren que decenas de miles de soldados rusos han muerto o han resultado heridos.

El ejército ucraniano, reforzado por la inteligencia suministrada por la OTAN y armamento avanzado, ha logrado infligir grandes bajas a las fuerzas rusas, particularmente en batallas de alto perfil por ciudades como Bajmut y Jersón.

Las fuerzas ucranianas han utilizado hábilmente misiles antitanque, drones y sistemas avanzados de defensa aérea para contrarrestar la potencia de fuego históricamente superior de Rusia, convirtiendo la guerra en una prolongada batalla de desgaste que le ha costado a Rusia mucho más de lo previsto.