Putin amplía la guerra al espacio: "Es grave"

Putin amplía la guerra al espacio: "Es grave"

Suecia acusa a Rusia de "interferencias nocivas" con sus satélites.

SpaceX Falcon 9 topped with Crew Dragon spacecraft blasts off for International Space Station with the Axiom Mission 3 crew.Anadolu via Getty Images

Las autoridades de Suecia advierten que Rusia está provocando "interferencias nocivas" con los satélites del país escandinavo. Unos problemas que comenzaron el 21 de marzo, justo después de que Estocolmo pasara a formar parte de la OTAN y consolidara la posición de la alianza militar en el Mar Báltico.

Según informa Bloomerg, la Autoridad Sueca de Correos y Telecomunicaciones envió el 4 de junio una carta a la agencia de las Naciones Unidas para pedir que la junta de regulación de radio de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, con sede en Ginebra, aborde estas interrupciones rusas.

Rusia asegura no saber nada al respecto

Suecia ha especificado que la interferencia de Rusia y Crimea se ha dirigido a tres redes de satélites Sirius diferentes situadas en la posición orbital de 5 grados al este, una de las principales posiciones satelitales que ofrecen servicio a los países nórdicos y Europa del Este. Así, se ha visto afectada la transmisión de televisión en Ucrania, que depende de un satélite objetivo propiedad de una empresa sueca, cuyo nombre no se ha mencionado.

"Estas perturbaciones son, por supuesto, graves y pueden verse como parte de acciones híbridas rusas más amplias dirigidas a Suecia y otros países", alerta el primer ministro sueco, Ulf Kristersson. "Estamos trabajando junto con otros países para encontrar una respuesta a esta acción", añade. En cambio, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, ha asegurado que no está al corriente del asunto.

Denuncias por ataques similares

Francia, los Países Bajos y Luxemburgo han presentado quejas similares ante la UIT, por lo que planean discutir la interferencia en la reunión de la Junta del Reglamento de Radiocomunicaciones la próxima semana. En abril, Estonia y Finlandia también acusaron a Moscú de interferir las señales de GPS, perturbando los vuelos y el tráfico marítimo mientras ponía a prueba la resiliencia de la infraestructura tecnológica de los miembros de la OTAN.