Ordenan parar de inmediato el puente sobre este estrecho que intenta superar al de España y Marruecos

Una de las obras públicas más ambiciosas desde que Meloni está al frente del gobierno italiano podría verse truncada por el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología de Italia (INGV), presidido por Carlo Doglioni, quien envió varias cartas alertando de posibles contratiempos que no se estarían teniendo en cuenta a la hora de llevar a cabo la construcción del puente sobre el Estrecho de Messina.

Las dudas respecto a este proyecto intentaron ser acalladas por la empresa Stretto di Messina, que respondió a las cartas de Doglioni asegurando que "el puente será la obra más segura del mundo, por lo que no hace falta la luz verde del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología para seguir adelante".

Según la empresa encargada de la obra, el INGV no realizó las pruebas suficientes para certificar el peligro del que avisa la institución italiana respecto a los riesgos sísmicos de la falla de Cannitello, localidad en la que se iniciaría la construcción del puente. 

Pese a la postura defendida por la compañía, los líderes de los partidos de la oposición (Alianza Verde e Izquierda y el Partido Demócrata; Avs) exigieron en la comisión de Transportes del Parlamento que "la Primera Ministra debería informar inmediatamente al Parlamento".

¿Qué denuncia Doglioni?

Según explicó el máximo responsable del INGV, el problema se encuentra en ciertos aspectos críticos del proyecto, que para el director general del Estrecho de Messina, Pietro Ciucci, no parecen fundamentadas en realidades. "El proyecto está completo y no falta ni la luz verde ni la certificación", y señalan que el INGV "colaboró con las empresas privadas de Eurolink tanto en la fase de redacción del proyecto definitivo como en la reciente actualización".

Pese a ello, Doglioni insiste en que son necesarios nuevos exámenes en profundidad sobre la presencia de fallas en Cannitello, aunque Ciucci sostiene que "no es capaz de producir movimiento del terreno", y destaca que "el puente fue diseñado para resistir el terremoto más fuerte de la zona. Será una de las estructuras más seguras de Italia y del mundo", concluyó.

Pero las declaraciones de Ciucci y de la empresa constructora no parecen convencer a la oposición italiana. Uno de sus líderes, Giuseppe Conte, presidente del Movimiento 5 Estrellas, afirmó que "nos enfrentamos a un nuevo episodio muy grave en el puente después de los diversos hallazgos sobre las deficiencias a nivel técnico, de ingeniería y medioambiental", y pide que el "gobierno aclare las cosas inmediatamente".

Otra de las voces críticas con el proyecto es la de Angelo Bonelli, líder de Avs, que pidió "que se detenga la carrera para aprobar este proyecto, ya que es un hecho de una gravedad sin precedentes como apuntan los organismos estatales como el INGV y el Consejo Superior de Obras públicas", y comunicó que ya había enviado las cartas de Doglioni al Ministerio de Medio Ambiente.