Los buzos de la Armada española podrán estar hasta cinco horas bajo el agua
La Fuerza de Guerra Naval Especial (FGNE) cuenta a partir de ahora con un sistema mucho más moderno y práctico que permitirá a los buceadores aguantar mucho más tiempo sumergidos y a una profundidad mayor.
La Fuerza de Guerra Naval Especial (FGNE) perteneciente a la Armada española y que opera desde la Estación Naval de La Algameca, contará a partir de ahora con nuevos equipos y material técnico para llevar a cabo las Operaciones Especiales que tengan lugar en el mar.
La principal novedad se encuentra en los nuevos equipos de buceo táctico, cuya compra ha sido gestionada por la Dirección de Gestión Económica de la Jefatura de Apoyo Logístico de la Armada, gracias a un contrato valorado en 1.020.016,53 euros adjudicado a Drager Safety Hispania SA.
El nuevo equipo (Drager LAR 8000) ya ha sido entregado a la Armada, y con su incorporación, se espera que sirva de complemento al LAR VI, utilizado desde hace bastantes años por la FGNE.
Una de las grandes aportaciones de este nuevo Drager LAR 8000 radica en su capacidad de poder usarse como material de circuito cerrado (CCR) o a mayores profundidades, como si hablásemos de un equipo de circuito semicerrado (SCR).
Además, se trata de un equipo no magnético, lo que implica que las botellas de oxígeno utilizadas tiene que tener esa cualidad. Otro de los aspectos destacados es la mínima resistencia respiratoria que ofrece, además de su diseño, muy fácil de utilizar.
Permite hasta 5 horas de inmersión hasta un máximo de 50 metros
Según informan, el Drager LAR 8000 se puede colocar tanto el parte frontal del cuerpo del buzo como en la espalda si fuese necesario, y apuntan que permite un buceo muy discreto, lo que los convierte en casi indetectables para los enemigos.
En cuanto a los aspectos técnicos, informan de que el buzo tendrá que respirar por una válvula pulmoautomática ubicada en un cartucho recargable DiveSorb Go/Pro 8000, en el que se almacena cal sodada, lo que permite respirar bajo agua sin emitir burbujas.
Pero sin duda, lo que lo convierte en un equipo más útil y potente que los anteriores para los buzos es su capacidad de activar la configuración SCR que dora al buzo de una combinación de gases entre nitrógeno y oxígeno. Esto les permitirá sumergirse hasta los 50 metros, mucho más que los 10 que permite el sistema CCR, además de permitirles respirar hasta 300 minutos (5 horas) bajo agua, dependiendo, eso sí, del tamaño de la botella y la cadencia de cada uno a la hora de respirar.