La ultra francesa Le Pen trata de salir al paso del apoyo explícito de Rusia
"No soy responsable de ese tipo de provocaciones rusas contra Francia y contra Emmanuel Macron".
La líder de la extrema derecha francesa, Marine Le Pen, calificó este jueves de "provocaciones de los rusos" y de "injerencia" el apoyo explícito que le ha mostrado el Kremlin de cara a la segunda vuelta de las elecciones legislativas en Francia el próximo domingo.
"No soy responsable de ese tipo de provocaciones rusas contra Francia y contra Emmanuel Macron", subrayó Le Pen en una entrevista al canal BFMTV cuando se le preguntó por las declaraciones de las autoridades rusas el miércoles en las que respaldaban la línea de la Agrupación Nacional (RN).
Sobre todo, se quejó de que responsables de otros partidos se lo echen en cara, como el candidato socialista a las europeas, Raphael Glucksmann, que en otra entrevista dijo que el RN es "una quinta columna de Vladimir Putin" el presidente ruso.
"En una democracia, es vergonzoso" que se utilice "esa violencia" y que se traté como "parias" a "los votantes de RN", denunció la líder de la extrema derecha, que aseguró que si llegan al poder, "un Gobierno de RN no tratará así a la oposición".
De dónde viene la polémica
En el origen de esta polémica está un mensaje del portavoz del Ministerio ruso de Exteriores en la red social X en la que subrayaba que "el pueblo francés busca una política exterior soberana que sirva sus intereses nacionales y que rompe con los dictados de Washington y Bruselas". El portavoz añadía, en una clara alusión en particular al presidente francés, Emmanuel Macron, que "los responsables franceses no podrán ignorar esos profundos cambios de actitud de la gran mayoría de los ciudadanos".
Los vínculos, al menos pasados, de RN y de Le Pen con Rusia y con el régimen de Putin han sido evidentes, aunque la formación ultraderechista se ha desmarcado tras la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022. Le Pen es recordada no sólo por verse con el mandatario ruso en Moscú, amigablemente, sino por pedir créditos para su formación a bancos rusos.
No obstante, aunque ahora defiende el apoyo a Ucrania para que pueda defenderse, el partido ha hecho hincapié en que si llega al Gobierno no autorizará ni el envío de tropas o instructores a territorio ucraniano, como ha barajado Macron, ni la entrega de misiles de largo alcance con los que Kiev podría atacar en profundidad en Rusia.