La inaccesible isla plagada de cobras que lleva a todo ser humano a la muerte

La inaccesible isla plagada de cobras que lleva a todo ser humano a la muerte

En ella habita la especie cuyo veneno está considerado como el que más rápido es capaz de matar. Tiene una tasa de letalidad nada desdeñable: 93% por mordedura.

Serpiente Bothrops insularis, conocida como punta de lanza dorada.Getty Images/iStockphoto

Podría formar parte de la sinopsis de una historia de piratas (y no andaría desencaminado siguiendo los pasos de las leyendas que acompañan su historia), pero hay mucho más en todo lo que rodea a la conocida como la 'isla de las Cobras'. Una isla a la que está  terminante prohibido el acceso a las personas, con la excepción de un puñado de científicos e investigadores.

Detrás de ese apropiado sobrenombre, se esconde una de las islas consideradas como los entornos más peligrosos para el ser humano -en realidad para una buena lista de seres vivos- de todo el planeta. El principal motivo: las múltiples variedades de serpientes venenosas que la habitan, entre ellas la que es conocida por tener el veneno que más rápido es capaz de matar.

Estamos hablando de la isla brasileña conocida como Queimada Grande, ubicada a tan solo 30 kilómetros de la famosa costa de São Paulo. Cuenta el mito que los bucaneros empleaban esta tierra para ocultar sus tesoros y que para ello la llenaron de serpientes con el fin de protegerlos. La realidad es muy diferente

El veneno de serpiente que más rápido mata: una tasa del 93%

Según un reportaje de National Geographic, en realidad las sierpes son endémicas del lugar y colonizaron esta extensión de 23 hectáreas ya hace 11.00 años, cuando formaba parte del continente americano hasta alcanzar una proporción actual de una serpiente por metro cuadrado.

Ese aislamiento de estas serpientes con la subida del mar y la separación de la isla del continente también derivó en una característica fundamental de los reptiles. Su veneno puede llegar a ser cinco veces más letal que el de mismas especies. ¿Por qué? Porque tuvieron que adaptarse ante la voraz competición por alimentarse, concretamente, para poder dar caza a aves migratorias que las doblan en tamaño.

Y de ahí, la reina de las serpientes -con perdón de la mamba negra-, si en esa metafórica monarquía triunfase la que cuenta con el veneno con mayor rapidez a la hora de matar. Hablamos entonces de la conocida como serpiente de cabeza de lanza dorada (Bothrops insularis), de la familia de Viperidae. Solo habita en esta isla y su caza furtiva está detrás de la prohibición de acceso a Queimada Grande -parece ser que el ser humano puede ser más peligroso que una de las serpientes más peligrosas del mundo-.

Una mordedura que provoca hemorragias internas con tasa de letalidad del 93%

Caracterizada por sus rasgos dorados y su intenso color áureo, la mordedura de la serpiente de cabeza de lanza dorada cuenta con una tasa de letalidad del 93%. No solo su veneno se vio potenciado, también su capacidad de mímesis con el entorno de esta isla y su predisposición a actuar de día. Se caracteriza por morder y retener a la presa hasta que el veneno empieza a actuar. 

¿Cómo afecta su mordedura? En líneas generales, causa un fuerte dolor, que deriva en náuseas, vómitos, ampollas de sangre, hemorragias internas, hasta desembocar en sangre en vómito y orina, necrosis y problemas renales que finalmente se saldan con la muerte de su víctima.