Italia paraliza la última fase del pacto migratorio en la UE
El país transalpino no ve claros algunos cambios introducidos en la propuesta.
No hay fumata blanca. La negociación de la última pieza que queda por acordar del Pacto Europeo de Migración y Asilo entre los Estados miembros de la UE ha sufrido una pausa este jueves. Cuando todo apuntaba a un acuerdo inminente, Italia ha decidido desmarcarse al no estar del todo de acuerdo con algunos cambios introducidos en la propuesta.
No obstante, el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado al término de la reunión que quedan solo algunos “matices” y se ha mostrado convencido de que el acuerdo se alcanzará “en los próximos días”, en todo caso “antes” de la próxima cumbre de la UE en Granada, que tendrá lugar el 6 de octubre.
Asimismo, Grande-Marlaska ha destacado que existe un apoyo “mayoritario” a la propuesta presentada sobre el Reglamento de Crisis, que establece las normas a aplicar ante situaciones de flujos masivos de migrantes y prevé respuestas solidarias “a la carta” y derogaciones en las normas generales de asilo.
Aunque el ministro en funciones no ha precisado la lista de países que dan ese apoyo, sí que ha destacado que se trata de “una amplia mayoría”. Además, ha agregado que el objetivo es siempre “que la mayoría sea más y más” y que se está haciendo “todo lo posible para concluirlo de esa forma, porque nos hace a todos más fuertes”.
Por su parte, la comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, ha indicado en rueda de prensa al término de la reunión que “no hay grandes obstáculos” y que “tendremos una decisión formal en unos días”
Los cambios que Italia no ve claros
El último texto presentado este jueves contó con el apoyo de Alemania y Francia pero se opusieron durante un debate público Polonia y Hungría. Italia, que no intervino en el debate celebrado durante el Consejo, no vio clara la propuesta presentada y el ministro de Interior de ese país, Matteo Piantedosi, abandonó de manera prematura la reunión con destino a Roma.
Los cambios introducidos se refieren, según medios italianos, a la eliminación de la posibilidad de derogar las normas sobre las condiciones de acogida cuando hay llegadas masivas de inmigrantes, algo que quiere Italia y que finalmente fue eliminado del texto, así como a disposiciones relativas a las operaciones de ayuda humanitaria de las ONG.
En cualquier caso, fuentes diplomáticas han detallado que no se trata de un desacuerdo de fondo sino de cuestiones internas en Italia que se espera que sean resueltas en breve, en cuestión de “días”.
La propuesta será remitida a los embajadores permanentes (Coreper) y una vez se constate que existe una mayoría cualificada que apoya el texto, se podría formalizar el acuerdo y el siguiente paso sería el inicio de las negociaciones con el Parlamento Europeo.