Expertos en la guerra revelan en plan de Putin para engañar al ejército de Ucrania con esta maniobra
La última ofensiva en la región de Járkov sería un juego de distracción para las tropas ucranianas, según un analista finlandés.
Un nuevo asalto terrestre ruso en el noreste de Ucrania ha logrado capturar cinco aldeas, tal y como confirmó este sábado el Ministerio de Defensa de Rusia. Ucrania no ha hecho declaraciones al respecto, pero los periodistas locales confirmaron que Borysivka, Ohirtseve, Pylna y Strilecha cayeron ante las tropas rusas este viernes.
El gobernador de Járkov, Oleg Sinegúbov, informó en su canal de Telegram que 30 localidades de la región fronteriza fueron atacadas con artillería o bombardeados por la aviación enemiga. Un total de 1.775 civiles tuvieron que ser evacuados como consecuencia de esta ofensiva.
"Rusia ha lanzado una oleada de acciones contraofensivas en esa dirección. Ucrania las ha recibido con tropas, brigadas y artillería”, dijo el viernes en una rueda de prensa Zelenski, que destacó que el mando ucraniano sabía que los rusos habían reforzado sus tropas en esa zona de la frontera y desplegó allí las tropas suficientes para repelerlas con fuego.
Sin embargo, como informa Express, los analistas tienen dudas sobre esta ofensiva. Están especulando sobre las verdaderas intenciones del Kremlin.
De hecho, el analista finlandés Joni Askola ha sugerido ya que el ataque perpetrado en la región de Járkov podría tener que ver con un plan elaborado por Putin para alejar a las tropas ucranianas de zonas ríticas como Chasiv Yar y las ciudades al oeste de Avdiivka, donde tuvieron lugar las anteriores ofensivas.
Askola afirma que "cualquier progreso adicional más allá de este punto sigue siendo un gran desafío para los rusos". Y añadió que el objetivo principal podría no ser grandes conquistas territoriales, sino desviar la atención y los recursos ucranianos de la región de Donbás en el este de Ucrania, donde se encuentran los objetivos estratégicos de Rusia.