Este país de la OTAN lanza una advertencia inesperada sobre mandar soldados a Ucrania: "Perderemos la guerra"
La postura de Polonia refleja un cambio en el apoyo militar directo mientras crecen las dudas sobre las posibilidades de éxito de Ucrania.
En una declaración que subraya el creciente escepticismo entre algunos aliados clave de Ucrania, Polonia ha descartado oficialmente enviar tropas propias al país vecino para ayudar en su lucha contra Rusia. Al menos por ahora.
"En este momento, cualquier participación de tropas polacas en Ucrania debe ser descartada", señaló el lunes Jacek Siewiera, jefe de la Oficina de Seguridad Nacional de Polonia, en una entrevista con el canal de televisión TVN24, recogida por la agencia TASS.
El alto funcionario también expresó su escepticismo sobre las posibilidades de éxito de Ucrania en recuperar los territorios ocupados por Rusia, incluso con una mayor movilización de fuerzas. "Seguiría habiendo muy pocos efectivos para recuperar, en el marco de una contraofensiva, los territorios que han sido conquistados", afirmó.
El 25 de noviembre, el diario Le Monde informó de que los países europeos habían retomado las conversaciones sobre desplegar tropas o contratar combatientes de empresas militares privadas en Ucrania ante la posibilidad de que Estados Unidos reduzca su apoyo a Ucrania tras la toma de poder de Donald Trump como presidente.
Por su parte, Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, advirtió que la presencia de contingentes militares extranjeros en Ucrania podría incrementar significativamente el riesgo de consecuencias extremadamente graves, que podrían llegar a ser irreversibles.
Cambio de rumbo
Desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022, Polonia ha sido uno de los principales aliados de Ucrania dentro de la OTAN. El país ha destinado cerca del 0,7% de su PIB en apoyo a Volodímir Zelenski y sus tropas, según el Support Tracker del Instituto de Kiel, y ha desempeñado un papel clave en proporcionar ayuda humanitaria y militar.
La posibilidad de un despliegue directo de tropas polacas había sido considerada, aunque nunca concretada. En declaraciones pasadas, el ministro de Asuntos Exteriores polaco, Radoslaw Sikorski, dejó abierta la posibilidad, sugiriendo que "ninguna opción debería descartarse". Estas palabras reflejaban un enfoque más proactivo.
Sin embargo, en las últimas semanas, Polonia ha tomado un rumbo diferente. A finales de noviembre, Siewiera aclaró a Radio ZET que enviar soldados al frente no era "la solución adecuada", señalando la necesidad de obtener un diagnóstico realista sobre las capacidades económicas y militares de Ucrania.