Erdogan envía al Parlamento turco el protocolo de adhesión de Suecia a la OTAN para su ratificación
Aunque la Gran Asamblea Nacional turca vote a favor del ingreso de Suecia, Estocolmo seguirá necesitando que Budapest dé también su visto bueno.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha firmado este lunes el protocolo de adhesión de Suecia a la OTAN, y lo ha derivado ya al Parlamento turco, que deberá dar el visto bueno final, según ha informado el departamento de comunicación de la Presidencia.
"El protocolo de adhesión de Suecia a la OTAN fue firmado el 23 de octubre de 2023 por el presidente Recep Tayyip Erdogan y enviado a la Gran Asamblea Nacional de Turquía", ha escrito la presidencia en la red social X (antes conocida como Twitter).
El camino de Suecia para unirse a la OTAN comenzó durante la cumbre de aliados en Madrid en verano del año pasado de la mano de Finlandia. Desde entonces, sin embargo, ha estado bloqueada por Turquía y Hungría, que todavía no han ratificado su ingreso.
Ahora, aunque la Gran Asamblea Nacional turca vote a favor del ingreso de Suecia en la OTAN, Estocolmo seguirá necesitando que Budapest dé también su visto bueno para lograr la aprobación de todos los miembros de la Alianza Atlántica.
Tras meses de bloqueo, el presidente turco ya había dicho en las últimas semanas que daría su visto bueno al acceso del país nórdico "si EEUU cumple sus promesas", aunque siempre matizó que la decisión final se tomará en el Parlamento, donde su partido, el AKP, tiene mayoría junto con su aliado, el ultranacionalista MHP.
La oposición, como el partido socialdemócrata CHP y el izquierdista prokurdo HDP, apoyan la candidatura sueca, pero el voto del bloque AKP-MHP aún no es seguro, dado que el propio Erdogan adelantó el mes pasado que la decisión dependería de ciertas concesiones de Washington.
"Espero que si ellos (EEUU) se mantienen fieles a su palabra, nuestro Parlamento también se mantendrá fiel a la suya. Actuaremos en consecuencia", dijo Erdogan en septiembre. En ese momento no precisó de qué promesas se trataba, si bien dejó entrever que la venta de cazas F-16 a Turquía, bloqueada por el Congreso de EEUU, era un factor importante en las relaciones.
Ankara lleva un año negociando concesiones políticas con Suecia a cambio de su ratificación. Erdogan insiste en que Suecia debe limitar las expresiones públicas de apoyo a la guerrilla kurda, extraditar a personas buscadas en Turquía y, últimamente, poner freno a los actos de quema del Corán.