El misterioso país donde es obligatorio que los coches sean de color blanco
Se ha llegado a comparar con Corea del Norte.
Turkmenistán es un país aislado y enigmático del Asia Central. Allí los turistas tienen prohibido viajar solos, y sus habitantes deben cumplir con unas estrictas y extravagantes normas. Además, debido al secretismo y rígido control gubernamental, este país ha sido comparado con Corea del Norte.
Otra curiosidad es que en su capital, Ashgabat, se encuentran varios récords Guinness, como ser la ciudad con mayor cantidad de mármol en el mundo. También, cuenta con imponentes estatuas, como la del ex presidente Gurbanguly Berdimuhamedow, padre del actual mandatario, que está cubierta de pan de oro.
Este país ha mantenido sus fronteras cerradas desde la era de Saparmyrat Niyazov, el primer líder tras la independencia de la Unión Soviética. Este ex presidente impuso un régimen de culto a su personalidad y gobernó desde 1985 a 2006. Además, se hizo famoso por leyes extravagantes, como la prohibición del ballet o de los coches de color oscuro.
El blanco por excelencia
Hasta hace poco, todos los coches debían ser de color blanco para armonizar con el mármol del paisaje arquitectónico de Ashgabat. Aunque la ley fue derogada, parece que sigue vigente pues el color blanco sigue dominando las calles. Esto se debe a que los ciudadanos temen que el presidente, Serdar Berdimuhamedow, pueda revertir la decisión en cualquier momento.
Quienes logran visitar Turkmenistán no solo admiran la imponente arquitectura de Ashgabat, sino que se van a ver la impactante “Puerta del Infierno”, un cráter de gas metano que arde desde 1971 y se ha convertido en una atracción mundial.