El misil que nunca podrá tener España ocasiona una tragedia a Rusia
Los ATACMS, entregados por sorpresa por la Casa Blanca, han servido para atacar una base de formación, con más de cien bajas rusas.
Más de 100 soldados rusos han muerto en un ataque a un campo de entrenamiento en la región oriental de Luhansk, en Ucrania, golpeado con Sistemas de Misiles Tácticos del Ejército de largo alcance (ATACMS) suministrados a Kiev por Estados Unidos en secreto y que España no puede lograr.
Un voluntario de GeoConfirmed, una cuenta de OSINT que geolocaliza contenido visual de la guerra entre Rusia y Ucrania, fue quien compartió por primera vez un vídeo del ataque. Esta fuente afimó que las imágenes mostraban un "ataque de ATACMS ucranianos, con 4 ATACMS, incluido uno fallido, golpeando un área de entrenamiento rusa en Mozhnyakivka, Óblast de Luhansk". Según dichas imágenes, las pérdidas eran "significativas", según se ha hecho eco el medio norteamericano Newsweek.
Recientemente, Estados Unidos envió en secreto a Ucrania ATACMS de largo alcance capaces de alcanzar objetivos a una distancia de hasta 300 kilómetros, pero ni Kiev ni Moscú han informado por el momento de que se hayan usado ya en este ataque ni su alcance real y sus pérdidas.
La cuenta de inteligencia de fuente abierta OSINTtechnical dijo que el clip mostraba a las fuerzas ucranianas realizando un ataque en un campo de entrenamiento ruso con un trío de misiles balísticos tácticos M39 ATACMS, de Washington. "Al menos un ATACMS alcanzó directamente a un grupo de más de 100 soldados rusos, arrojándoles cientos de bombas APAM M74", sostenía la cuenta, compartiendo una imagen fija de un grupo de soldados reunidos en el área antes de los ataques.
El Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), un grupo de expertos independiente con sede en EEUU y de referencia en el estudio de esta guerra de invasión, destacó estas imágenes en su último análisis del conflicto en Ucrania. Afirmó que Kiev atacó recientemente un campo de entrenamiento militar ruso a unos 80 kilómetros detrás de la línea del frente en la retaguardia de Luhansk. "Las imágenes geolocalizadas publicadas el 1 de mayo indican que las fuerzas ucranianas atacaron un campo de entrenamiento ruso al suroeste de Mozhnyakivka, probablemente con cuatro ATACMS, y supuestamente mataron a 116 militares rusos", dijo el ISW, avalando las informaciones de redes sociales.
El ejército de Kiev añadió en una actualización, el jueves, que las fuerzas de Moscú perdieron 1.030 soldados en las últimas 24 horas, lo que eleva el total a 470.870. Las cifras fueron proporcionadas por el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania, que publica diariamente estimaciones de las pérdidas de tropas y equipos de Rusia. No se destacó si se incluye o no ese centenar de soldados de la base atacada.
Las estimaciones sobre el número de víctimas varían; las cifras de Ucrania suelen superar las de sus aliados occidentales. Moscú rara vez comparte información sobre el número de bajas que ha sufrido en la guerra . En septiembre de 2022, el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, dijo que 5.937 soldados habían muerto desde que comenzó la guerra. Una cifra irrisoria, dice Occidente.
Kiev tampoco revela sus bajas de guerra. Una evaluación de la Agencia de Inteligencia de Defensa de Estados Unidos filtrada en abril de 2023 decía que Ucrania había sufrido entre 124.500 y 131.000 bajas, incluidos entre 15.500 y 17.500 muertos.
¿Por qué no los tiene España?
Los ATACMS, tan ansiados por Ucrania, no están entre el arsenal español ni estarán en un futuro cercano. La razón es que carece ahora mismo de capacidad de artillería antiaérea que lo sustente.
Según explicó el diario La Razón, en diciembre de 2011, el ejército dio de baja el lanzacohetes Teruel, de diseño español y en servicio desde mediados de los años 80, como sistema de armas operativo.
Un sistema que no tuvo ningún tipo de plan B y que, lejos de contar con una alternativa, nunca se ha podido desarrollar. Pero, 12 años después, el Consejo de Ministros aprobó el pasado 10 de octubre, el acuerdo por el que se autoriza la celebración del contrato para el suministro del sistema lanzacohetes de alta movilidad.
Todo a través del Sistema Lanzacohetes de Alta Movilidad (Silam), pero que no estará disponible hasta antes de 2028, pero sí permitirá al ejército español poder alcanzar objetivos más allá de los 300 kilómetros. Defensa por otra vía.
