Otro país se suma a Polonia en la tensión con Ucrania
El húngaro Orbán carga sobre las importaciones del grano y pone condiciones a su apoyo a Kiev: que "garantice los derechos" de la minoría magiar. Y se enfada con la UE: "Nos engañó".
El ultranacionalista Viktor Orbán ha dicho que se siente engañado por la Unión Europea (UE) respecto a las importaciones de cereales ucranianos. Así lo ha dicho el primer ministro húngaro días después de que Ucrania presentara una denuncia ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) contra Hungría, Polonia y Eslovaquia por prohibir las importaciones de productos agrícolas ucranianos.
Viktor Orbán, primer ministro de Hungría, ha señalado: "Digámoslo claro: nos engañaron. El grano ucraniano no fue llevado a África. Lo venden aquí en Hungría, más barato que el grano de los productores húngaros, expulsando al grano nacional de nuestro propio mercado."
"Por eso, junto con Polonia y Eslovaquia, hemos ordenado la prohibición de importar 23 productos agrícolas procedentes de Ucrania".
Los agricultores húngaros han organizado recientemente varias protestas con tractores en las carreteras cercanas al cruce fronterizo.
Las condiciones
Además, el Gobierno húngaro advirtió anoche de que no apoyará a Ucrania en ningún asunto en foros internacionales hasta que se restablezcan los derechos de la minoría magiar en el país, especialmente los educativos, que Budapest considera están siendo vulnerados.
"No apoyaremos a Ucrania en ninguna cuestión en el ámbito internacional hasta que restablezca las leyes anteriores que garantizaban los derechos de los húngaros en Transcarpatia", aseguró Orbán también en el Parlamento.
Se estima que unos 150.000 ucranianos de etnia e idioma húngaro viven en la región de Transcarpatia, que hasta 1918 perteneció a Hungría.
Orbán denunció que la dirección de un instituto en la ciudad de Mukáchevo, en esa región, ha prohibido al comienzo del curso escolar que se cante el himno nacional o se exhiban los colores húngaros en actividades escolares.
Hungría ya protestó en 2017 contra la aprobación de una ley por el Parlamento ucraniano que estableció el ucraniano como idioma oficial de la enseñanza en el país.
Budapest argumentó entonces que eso obligaría a cerrar todas las instituciones educativas de primaria, secundaria y nivel superior que funcionan en otra lengua que no sea el ucraniano.
Hungría es, junto a Turquía, el único país miembro de la OTAN que no ha suministrado armas a Ucrania para ayudarle a defenderse de la invasión rusa.
El gobierno de Orbán es considerado el mejor aliado comunitario de Moscú y ha criticado las sanciones europeas impuestas a Rusia por su agresión a Ucrania.