El agente del CNI captado por la CIA era el jefe del área de Rusia en la Inteligencia española
El mando llegó a entregar numerosa información clasificada sobre Moscú a la agencia de contraespionaje de EEUU, según recoge 'El País'. Creen que buscaban tener un topo y que su captación ocurrió hace años.
Nuevas revelaciones clave en el marco de la que ha sido la mayor filtración o fuga de información en el seno de la Inteligencia española desde que estalló el 'caso Perote' hace cerca de 30 años. Uno de los dos agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que fueron detenidos el pasado septiembre, cuando se descubrió que habían sido captados por la CIA, se trata del jefe de área de Rusia.
Así lo recoge El País este lunes en una información en la cita a fuentes conocedoras de la investigación. Según esas mismas fuentes, dicho mando, un agente de más de 50 años, se corresponde con un destacado analista, militar de carrera procedente de la Armada, y con una larga trayectoria en el servicio de inteligencia.
En este sentido, dicho agente, que todavía permanece bajo arresto en prisión preventiva, habría entregado numerosa documentación sensible sobre Moscú a la CIA.
Objetivo: saber el grado de conocimiento 'real' del CNI sobre redes rusas
De esta forma, y según la citada información, el objetivo de la CIA era del de conocer el verdadero grado de conocimiento del CNI sobre las redes rusas y los lazos tejidos aún con Moscú, en el marco de una renovada importancia de todo lo que atañe al país gobernado por Putin desde hace dos años, es decir, tras el estallido de la invasión rusa sobre Ucrania.
Aunque el principal objetivo de las agencias de espionaje es este, cabe mencionar que tanto la CIA como el CNI pertenecen a países aliados en lo que a la lucha contra el espionaje ruso se refiere.
Creen que fue captado hace años y que la CIA buscaba tener un topo en el CNI
Con todo, las fuentes consultadas por El País sugieren que ni la captación fue reciente ni su objetivo final o global sería obtener únicamente información clasificada sobre Rusia. Es decir, la CIA habría invertido tiempo en aproximarse al agente español y con la intención de tener un 'topo' al que solicitar datos reservados de otra índole en cualquier momento.
Para sustentar esto, explican las fuentes conocedoras de la investigación al citado diario, es necesario tener en cuenta que una operación de captación a este nivel se realiza mediante un acercamiento que acostumbra incluso a durar años. Es necesario ganarse la confianza del agente convertido a agente doble y conocer bien sus debilidades o intereses.
En esa línea, este agente ya tuvo EEUU como destino. A comienzos de los 2000 reclamó una excedencia para trabajar en una multinacional estadounidense, momento en el que sospechan que comenzó el tanteo de la CIA. A esto se suma otra clave, lo que delató o hizo saltar las alarmas en el CNI fue que este agente trató de acceder a documentación que no tenía que ver con su área de trabajo, violando el 'principio de necesidad de conocer', por la que se rige la Inteligencia española. Una forma de compartimentar la información clasificada.