El acuerdo de alto al fuego desata la ira de Putin: "Le resultará difícil aceptar"
"Cualquier acuerdo debe ser en nuestros términos, no en los estadounidenses".

Los legisladores rusos han señalado que el presidente del país, Vladímir Putin, se va a mantener cauteloso ante la propuesta de alto el fuego impulsada por EEUU y Ucrania, en un momento en que las fuerzas rusas continúan avanzando en el campo de batalla, especialmente en la región de Kursk.
En agosto del año pasado, las fuerzas ucranianas lanzaron una ofensiva relámpago en la frontera rusa, apoderándose de un sector que el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, esperaba utilizar como palanca en las conversaciones de alto el fuego.
Sin embargo, en las últimas semanas, la incursión ha sufrido importantes reveses, con las tropas rusas recuperando el control de varias zonas, incluida la ciudad de Sudzha. Recientemente, se han difundido imágenes de soldados rusos ondeando la bandera tricolor en el centro de esta localidad, mientras que otros clips mostraban vehículos ucranianos siendo atacados por drones rusos.
"Nuestras tropas están avanzando con éxito en la región de Kursk, liberando áreas que estaban bajo el control de los militantes. La dinámica es buena", afirmó el martes a los periodistas el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. Estos avances coinciden con las negociaciones de alto el fuego en la ciudad saudí de Yeda, donde Ucrania aceptó un alto el fuego de 30 días propuesto por Estados Unidos, tras varias horas de discusiones.
Por su parte, Zelenski afirmó que ahora depende de Rusia responder a la propuesta de paz. En una rueda de prensa, subrayó que "ninguno de nosotros confía en los rusos" y advirtió que Ucrania espera que EEUU tome "medidas contundentes" contra Moscú si rechaza la propuesta.
Conversaciones entre Rusia y EEUU
El Kremlin ha anunciado que este jueves habrá una reunión entre la parte rusa y los enviados especiales de Trump para abordar la propuesta de tregua. Sam Greene, director de Resiliencia Democrática del Centro para el Análisis de Políticas Europeas (CEPA), describe a Daily Mail esta propuesta de alto el fuego como una "pieza magistral de diplomacia" de Kiev.
"A costa de una promesa teórica de observar un alto el fuego bilateral y palabras cálidas para la administración Trump, el presidente Zelenski restauró el apoyo militar y de inteligencia estadounidense, evitó quedar atrapado en un acuerdo minero en ausencia de garantías de seguridad y puso la pelota firmemente en la cancha de Moscú", señala.
Los legisladores rusos, sin embargo, se muestran escépticos con esta propuesta. "Rusia está avanzando (en el campo de batalla), por lo que será diferente con Rusia", afirma el senador ruso Konstantin Kosachev.
"Cualquier acuerdo debe ser en nuestros términos, no en los estadounidenses", añade, mientras que el legislador Mikhail Sheremet comenta a la agencia estatal de noticias TASS que Moscú "no tolerará que lo atornillen".
"Es difícil para Putin aceptar esto en su forma actual. Tiene una posición fuerte porque Rusia está avanzando", opina a Reuters otra fuente de alto rango, que habló bajo condición de anonimato.
Otros consideran que la propuesta de alto el fuego parece ser una "trampa" desde la perspectiva de Moscú porque a Putin le resultaría difícil detener la guerra sin algunas garantías o promesas concretas.