Disparan en la cabeza a un menor negro tras tocar el timbre de una casa equivocada en EEUU

Otra historia de racismo y pistola fácil que acaba en drama en Estados Unidos. Ahora la víctima ha sido Ralph Yarl, un menor afroamericano de 16 años, disparado en la cabeza por el simple delito de llamar a la puerta equivocada. La mezcla de prejuicios, odio y armas acabó con el chico en el hospital, aunque se está recuperando. 

Los hechos tuvieron lugar el pasado jueves por la noche en Kansas City, estado de Missouri, cuando el adolescente fue a recoger a sus hermanos pequeños pero se equivocó de número de la calle y llamó al timbre de la casa equivocada. Después de tocar, le dispararon, hiriéndolo en la cabeza y el brazo.

Según el relato familiar, el joven confundió la dirección de dos casas prácticamente iguales, y llamó donde no era. Su atacante fue a la cabeza, directamente, pero cuando ya estaba en el suelo le volvió a disparar. El joven habría salido corriendo posteriormente, intentando pedir ayuda hasta en tres casas diferentes. "Es un error común, confundir una casa con otra a la vuelta de la esquina", señala un vecino a medios norteamericanos. 

Ralph ha estado ingresado, grave en el hospital, con lesiones que se consideraban potencialmente mortales. Sin embargo, su padre, Paul, informó este martes de que el chico ha sido dado de alta y se encuentra en casa donde su madre, que es enfermera, lo atiende. "Sigue mejorando. Responde y está haciendo buenos progresos", añadió, según la Agencia EFE. El chico es estudiante de Secundaria y músico en una orquesta local. 

Numerosas personas se han manifestado estos días en Kansas City, reclamando el arresto y procesamiento del atacante. Al final, es lo que ha ocurrido. Andrew Lester, un blanco de 84 años, dueño de la casa y de la pistola y ejecutor de los disparos, ha sido detenido y la fiscalía del condado de Clay ha presentado cargos contra este hombre, sospechoso de disparar contra el chaval, por asalto en primer grado y acción criminal armada.

Lester estuvo detenido durante 24 horas, lo máximo para un sospechoso de crimen hasta que se presentaron los cargos, y después fue dejado en libertad mientras la policía buscaba más evidencias. Según los registros judiciales citados por la televisora KCTV, Lester dijo que disparó dos tiros a los pocos segundos de abrir la puerta. Vio al adolescente huir y llamó a la policía desde el teléfono de su casa.

El acusado le dijo a la policía que no hubo intercambio de palabras y que el adolescente no había dicho nada antes de abrir la puerta.

Explicó que "era lo último que quería hacer (disparar), pero estaba 'muerto de miedo'" debido al tamaño del hombre y a la edad de Lester (84 años) y su "incapacidad para defenderse".

Misuri es uno de los estados del país con una ley de "defensa del espacio propio", que permite a aquellos que se sienten amenazados defender su vida o propiedad sin retroceder. El fiscal señaló que el castigo máximo por el cargo de asalto es cadena perpetua.

Una oleada de solidaridad

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llamó este lunes al joven herido para darle su apoyo. "Esta noche, el presidente habló por teléfono con Ralph Yarl y le deseó una pronta recuperación", dijo la Casa Blanca en un comunicado.

Una campaña GoFundMe iniciada por Faith Spoonmore, tía de Yarl, había recibido este lunes al mediodía más de 1,2 millones de dólares y los abogados de la familia criticaron la liberación del sospechoso.

Jennifer Houston, Leslie Jones, Halle Berry, Justin Timberlake y otras celebridades se han sumado al coro de quienes han protestado por el incidente, que ha causado una oleada de apoyo en forma de protestas y de mensajes en redes sociales. 

"¡Dios mío! Se me parte el corazón por este joven y su familia", tuiteó la cantante Houston, cuyo sobrino de siete años murió en 2008 en Chicago. "Rezo por su recuperación completa".