Desvelan la historia que hay detrás del empujón de Zelenski a su posible sucesor

Desvelan la historia que hay detrás del empujón de Zelenski a su posible sucesor

Cambio de mando en medio de la guerra contra Rusia.

Un graffiti del general Valery Zaluzhny realizado en muro dañado por los bombardeos rusos.Andriy Andriyenko

El reciente reemplazo de Valeriy Zaluzhny, Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, por Oleksandr Syrsky, marca el cambio más significativo de la cúpula militar de Kiev desde el inicio, hace dos años, de la invasión rusa. La decisión de Zelenski, según  Lawfaremedia, no solo se debe a razones estratégicas sino que también está motivada por cuestiones políticas y algo de conflicto personal.

Zaluzhny, que llegó al cargo en el verano de 2021, era parte de una nueva generación de oficiales ucranianos. Su popularidad se disparó después de una exitosa estrategia para defender la capital ucraniana al comienzo de la invasión rusa, lo que le hizo ganarse el apodo de "General de Hierro". Sin embargo, esta popularidad se convirtió en amenaza para el presidente de Ucrania, quien empezó a verlo como un posible rival político por su creciente aprobación pública.

Durante los primeros meses de la guerra, Zaluzhny evitó el enfrentamiento abierto con Zelenski, pero la tensión política se fue incrementando cuando figuras de la oposición comenzaron a promover a militar como una alternativa al actual presidente de Ucrania, alimentando la desconfianza de este hacia su comandante militar.

Las diferencias estratégicas también jugaron un papel crucial en la crisis. En la batalla de Bajmut, mientras Zelenski insistía en mantener la ciudad a toda costa, Zaluzhny abogaba por una retirada táctica para preservar las fuerzas ucranianas. Esta disputa se sumó a las tensiones existentes, exacerbadas por el fracaso de la contraofensiva del año pasado, donde ambos bandos se culparon mutuamente de la fallida operación.

El punto de inflexión llegó cuando Zaluzhny, en una entrevista para The Economist, reconoció públicamente que el avance del frente ucraniano en la guerra contra Rusia se había estancado, una versión que contradecía la narrativa optimista de Zelenski sobre el conflicto y que, por otra parte, socavaba su posición nacional e internacional. Esas declaraciones precipitaron su salida en febrero y la llegada de Syrsky al mando de las Fuerzas Armadas en un momento crítico para Ucrania.

Syrsky se enfrenta ahora a enormes desafíos, desde la deteriorada situación en el frente hasta la necesidad de una mayor movilización y la moral de las tropas. La capacidad de Ucrania para avanzar en el frente dependerá de la colaboración efectiva entre Syrsky y Zelenski, quienes deberán compartir la responsabilidad para superar la crisis actual.