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Colocan a Putin en la encrucijada y una de las decisiones conlleva confirmar su alianza con EEUU

Colocan a Putin en la encrucijada y una de las decisiones conlleva confirmar su alianza con EEUU

El Kremlin se debate entre avanzar en el campo de batalla o aceptar una tregua que refuerce su relación con Washington

El presidente ruso, Vladimir Putin, en una imagen reciente.Contributor

Desde hace 48 horas, EEUU y Ucrania tienen sobre la mesa un acuerdo que, en esencia, incluye un alto el fuego, al menos, durante 30 días. Moscú ha anunciado que espera que Washington le informe sobre el texto completo del acuerdo antes de tomar una posición definitiva. Sin embargo, la realidad es que el presidente ruso, Vladímir Putin, se enfrenta a un dilema crucial: continuar avanzando sobre el terreno o aceptar la propuesta de EEUU.

El pasado enero, durante una llamada telefónica con Donald Trump para felicitarle por su toma de posesión, Putin dejó claro que Rusia no está interesada en una "tregua frágil". El mandatario ruso reiteró su postura en febrero, desde Arabia Saudí y a través del ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, quien ha insistido en que el Kremlin ha dejado claras sus condiciones para lograr la paz, nada de "medidas a medias". Ahora, con Marco Rubio actuando en nombre de la Administración Trump, para Putin, la decisión de aceptar o rechazar este alto el fuego no es sencilla.

Las razones de la encrucijada en la que está Vladimir Putin son evidentes, aunque no son sencillas. Estos últimos dos meses, Rusia ha logrado avances significativos en los frentes principales del conflicto. En el este de Ucrania, siguen ganando terreno en el estratégico valle, mientras que en Kursk recuperan diariamente poblaciones perdidas desde agosto. Moscú habla de un "momento crucial" que Putin sacrificaría si acepta una tregua. Por otro lado, el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca ha reabierto el canal de comunicación directa entre Washington y el Kremlin. El presidente ruso también es consciente de que la oportunidad de consolidar una "victoria" respaldada por EEUU, manteniendo el 20% del territorio ucraniano y salir del bloque internacional, vigente desde febrero de 2022, no es algo que pueda despreciarse.

La decisión que tome Putin no solo afectará el curso de la guerra, sino también su relación con Trump. Aceptar la tregua supondría dar el primer paso en una propuesta impulsada por el expresidente estadounidense, no por el actual mandatario, Joe Biden. Rusia no entrará en una discusión sobre un alto el fuego sin exigir garantías de que este gesto conduzca directamente a una mesa de negociación para poner fin a la guerra, con la mayoría de las condiciones que ya ha transmitido a Trump.

Además, no se puede pasar por alto que Rusia, tras tres años de aislamiento internacional, vuelve a estar en el centro de la escena, no por razones militares o económicas, sino diplomáticas. El hecho de que las decisiones que se tomen en los próximos días dependan de Moscú es, en sí mismo, una victoria para el Kremlin. Putin ha logrado una serie de triunfos sin un esfuerzo significativo, gracias a la mediación de Trump. Que Rusia hoy determine el curso de los acontecimientos al aceptar o rechazar una propuesta preparada por la diplomacia estadounidense es otro logro que, aunque parezca menor, se sumará a otros más grandes en el futuro.

La primera oportunidad realista para la paz

La respuesta de Moscú a la propuesta de tregua también es una apuesta personal para Trump. El expresidente estadounidense, conocido por personalizar incluso los asuntos diplomáticos más complejos, necesita un "sí" por parte de Putin para cumplir una de sus promesas electorales en sus primeros 100 días de mandato. Trump quiere, sin lugar a dudas, poner fin a la guerra en Ucrania. Su enfoque ha quedado claro en la forma en que trató al presidente ucraniano en Washington y en su decisión de suspender el envío de armas e inteligencia a Kiev. Para Trump, la pregunta que Putin debe responder es simple: "Si no es ahora, ¿cuándo?", explica OEMA.

Si se deja de lado el estilo personal de Trump y se analizan las acciones, es evidente que EEUU ha avanzado de manera rápida y eficiente en el tema de la guerra en Ucrania. Si aceptamos que, históricamente, "el fin justifica los medios" tanto en la guerra como en la diplomacia, hoy nos encontramos en un punto donde se abre una oportunidad realista: la primera posibilidad tangible de paz. La administración Trump no quiere que la guerra continúe, independientemente de las condiciones o demandas de las partes involucradas. Hará todo lo posible para lograr este objetivo, y es crucial que las otras dos partes encuentren la manera de transformar el actual "Paz a cualquier costo" de EEUU en una "Paz viable y duradera". Para la Casa Blanca de Trump, esto es secundario, pero para la esencia de lo que está en juego, debe ser entendido.