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Cazas ucranianos afinan la puntería y hieren de gravedad en zonas clave

Cazas ucranianos afinan la puntería y hieren de gravedad en zonas clave

Los aviones de combate ucranianos Su-27 equipados con bombas planeadoras GBU-39 de fabricación estadounidense están llevando a cabo ataques precisos. 

Un avión de combate ucraniano Su-27 en una imagen de archivo.Mykola Tys/SOPA Images/LightRocket via Getty Images

Los aviones de combate ucranianos Su-27 equipados con bombas planeadoras GBU-39 de fabricación estadounidense están llevando a cabo ataques precisos sobre objetivos rusos estratégicamente importantes, como puentes y puestos de mando, según informó Forbes.

Imágenes poco comunes captaron a un Su-27 arrojando cuatro bombas desde un solo pilón de ala en la región rusa de Kursk, utilizando una táctica de vuelo a baja altitud seguida de un ascenso brusco antes de soltarlas, según destacó el medio The New Voice of Ukraine. Esta maniobra ayuda a evadir los sistemas de defensa aérea enemigos.

Las bombas GBU-39 guiadas por GPS pueden viajar más de 95 kilómetros gracias a sus alas desplegables, lo que permite que los aviones permanezcan fuera del alcance de las defensas aéreas rusas. Los pilotos del Su-27 realizan vuelos a baja altitud, utilizando el terreno para ocultar su aproximación al radar, y ascienden bruscamente antes de lanzar las bombas para maximizar su alcance.

Esta táctica ha permitido a la Fuerza Aérea de Ucrania minimizar las pérdidas, aunque Rusia ha logrado destruir "una cantidad preocupante de aviones ucranianos en tierra", incluidos varios Su-27, según el mismo medio. 

La Fuerza Aérea de Ucrania, que opera con recursos limitados, despliega aproximadamente entre 10 y 12 bombas planeadoras por día, en comparación con el uso de hasta 100 bombas diarias de Rusia. Como resultado, los ataques ucranianos se centran en objetivos de alto valor, como puentes estratégicos, centros de mando y fortificaciones, mientras que la aviación rusa apunta principalmente a trincheras y ciudades de primera línea.

Un objetivo reciente fue un puente sobre el río Seim en el óblast de Kursk, Rusia, construido para reforzar las posiciones defensivas rusas, según Forbes.