Amistades peligrosas: un excoronel de la OTAN alerta de que la vida de Putin corre peligro por sus "compañeros gánsteres"
"Con mucho gusto le echarán algo en el té y tomarán el poder".
La guerra en Ucrania está poniendo al presidente ruso, Vladimir Putin, en riesgo de ser envenenado por sus "compañeros gángsters", ha asegurado el excoronel de la OTAN Hamish de Bretton-Gordon.
El experto en armas químicas y excoronel del ejército británico ha sugerido que la incursión sorpresa de Ucrania en la región rusa de Kursk este mes habrá vuelto paranoico a Putin respecto de sus aliados más cercanos y que ahora está "en terreno inestable", según ha informado el medio Newsweek.
De Bretton-Gordon ha afirmado que si bien cree que Putin "tiene un control férreo", el hecho de que "tantas personas estén hablando sobre lo que está sucediendo" le llevan a tener que soluciar la situación "muy rápidamente".
"Si no lo hace, habrá muchos de sus amigos gángsters que con mucho gusto le echarán algo en el té y tomarán el poder", ha asegurado en una entrevista con The Sun. "Putin está en una situación delicada y la temperatura está subiendo", ha agregado.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, dijo en un mensaje publicado en la noche del lunes que la incursión militar ucraniana en Kursk ha permitido a su país lograr el control de casi 100 poblaciones en esa región de la Federación de Rusia, por lo que Kiev puede reivindicar 1.250 kilómetros cuadrados de territorio del país de Vladímir Putin.
"Los soldados ucranianos continúan la operación defensiva en las zonas designadas de la región de Kursk. En la actualidad, nuestras fuerzas controlan más de 1.250 kilómetros cuadrados del territorio enemigo y 92 asentamientos", afirmó Zelenski en el marco de su reunión con los jefes de las misiones diplomáticas exteriores de Ucrania celebrada en Dnipró (este) a última hora del lunes.
"Seguimos reforzando nuestras posiciones, estabilizando las zonas designadas y reponiendo el fondo de intercambio para Ucrania", abundó al referirse a los numerosas capturas de soldados rusos logradas en la incursión.
Según Zelenski, la operación en Kursk no habría sido necesaria si los socios extranjeros de Ucrania hubieran levantado todas las restricciones al uso de sus armas de largo alcance contra Rusia, mientras que su éxito demuestra la "ingenuidad" de la idea de "líneas rojas" con respecto a Rusia.