Qué posibilidades tiene Yolanda Díaz de ser presidenta
La vicepresidenta segunda se impone como la líder mejor valorada y UP sube en intención de voto pero sigue siendo la cuarta fuerza .
“Presidenta, presidenta, presidenta”. Al son de este grito entraba Yolanda Díaz al acto de ‘Otras políticas’ en el teatro Olympia de Valencia. Pablo Iglesias, desde que se marchó, se empeña en decir una y otra vez que la gallega será la primera mujer al frente de La Moncloa. Una predicción que sigue alimentando el exjefe de gabinete Iván Redondo en entrevistas y artículos frente a su anterior jefe, Pedro Sánchez. Es la política de moda, con permiso de Isabel Díaz Ayuso.
¿Lo logrará? ¿Hay posibilidades reales? ¿Es una burbuja? ¿Cómo la ven los españoles? ¿Qué dicen los sondeos? Todavía los expertos en demoscopia sostienen que es muy pronto, quedan dos años por delante y ni siquiera tiene montada la plataforma con la que podría presentarse. Además, ella tampoco ha confirmado que vaya a ser la candidata en los comicios de 2023. Su imagen tira mucho, pero no tiene detrás ahora un partido que la impulse.
Pero las encuestas sí arrojan unas tendencias: es la líder mejor valorada por los españoles y Unidas Podemos sube algo demoscópicamente pero sigue siendo la cuarta fuerza a bastante distancia del PSOE. Ninguna encuesta apunta a un sorpasso.
En el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas se dibuja este mapa electoral si hoy se pusieran las urnas: PSOE (27,6%), PP (20,9%), Vox (14,3%), Unidas Podemos (13,6%), Ciudadanos (5,7%), Más País / Compromís (3,1%) y ERC (2,6%). Esos datos reflejan que la izquierda podría superar de nuevo a las derechas, pero los socialistas siguen dominando ese espectro (aunque se sumaran UP y Más País).
Lo que también refleja es que los ‘morados’ son el partido que más ha crecido durante el último mes y son los beneficiados de la guerra interna de la coalición por la reforma laboral. Otra comparación a tener cuenta: UP lograría más votos que en las anteriores generales -donde marcó un 12,9%-, por lo que Díaz ahora sería una aspirante más fuerte que Pablo Iglesias.
Díaz vive su momento más dulce en proyección pública: es la líder mejor valorada por los españoles, según el CIS. Aunque no aprueba, tiene la nota más alta (4,76), por delante de Pedro Sánchez (4,45), Íñigo Errejón (4,13), Inés Arrimadas (3,61), Pablo Casado (3,41) y Santiago Abascal (2,79). El líder socialista le gana en la pregunta de a quién prefieres como presidente (citado por el 21,1%), pero ella es la segunda opción para los españoles (15,8%), quedando después Pablo Casado (10,7%).
José Pablo Ferrándiz, sociólogo y fundador de Elemental Research, se lanza a analizar la situación: “Hoy por hoy todavía ni tiene plataforma ni sabemos cómo se llamará ni quién va a integrarla. Es una hipótesis de hipótesis. Es la más valorada en el CIS, es verdad. Ninguno de los políticos aprueba, pero ella destaca por encima del resto. Puede atraer a electores de UP, PSOE y Más País, pero no traslada esa evaluación a sectores del centro y del centro derecha. En estos momentos para liderar hace falta tener cierto componente transversal”.
“Además, esa buena evaluación entre los votantes del PSOE es en un momento sin elecciones. Por lo tanto, se le sigue viendo como una aliada y no como una competidora. Cuando empiece la competición, se moverán”, aprecia Ferrándiz, que subraya: “La buena nota no se tiene que traducir en votos automáticamente”. Y añade otro componente: “Las dificultades del sistema electoral multipartidista para competir. De momento ya sería un logro sustituir a Vox en la tercera plaza, eso ya sería un éxito electoral. Hoy por hoy Vox está muy fuerte, sigue creciendo en base electoral”.
“Si no llegas a tercera posición, en muchas provincias te vas a quedar fuera y eso debilita tus posibilidades. Para ser presidenta primero tendría que liderar la izquierda”, resume el sociólogo.
“El sorpasso al PSOE no parece posible”, agrega Ferrándiz, que ilustra: “Cuando emergen liderazgos puede pasar porque los de alrededor están en decadencia, pero aquí no pasa. La mayoría de votantes del PSOE tiene una valoración positiva de Sánchez. Podrán decir me gusta cómo lo hace Díaz, la apruebo, pero no la voto porque ya tengo a mi líder que me parece que lo hace bien”. “Ni el PSOE ni Pedro Sánchez están en claro declive”, apostilla. Todo ello pensando en el escenario ideal de Díaz: “una candidatura de la izquierda donde no hubiera ninguna división ni discusión, pero esto en la izquierda suele ser difícil”. “Lo tiene complicado, un éxito sería ya superar a Vox en la tercera plaza”, concreta.
Lo que tiene claro Ferrándiz es que Díaz es mejor candidata ahora que Iglesias: Unidas Podemos es una marca desgastada para lo que nace, el componente importante de la ilusión, no lo genera UP hoy”. Para dibujar: “La izquierda siempre necesita un plus para ir a votar. UP tiene una base consistente y sólida, pero no tiene esa capacidad para atraer a otros votantes por ilusión. Quien puede construir esa alternativa a la izquierda del PSOE tiene que ser algo nuevo, con ilusión, Y hoy por hoy la que tiene más capacidad para construir esa marca es Yolanda Díaz indudablemente”.
Además, reconoce que ha sabido crear rápidamente un liderazgo: “Eso es muy difícil”. “Es opuesta a Iglesias, más dialogante y con capacidad de llegar a acuerdos, tiene otro tono, es gallega y quita el egocentrismo de Madrid”. “Eso es verdad, pero digo que hoy por hoy es muy difícil que sea presidenta, pero hoy por hoy es la única posibilidad que tiene esa izquierda de volver a reeditar un Gobierno como el de ahora”, añade Ferrándiz.
“No nos olvidemos, es que se necesitan, como Vox y el PP. El PSOE debería estar también ayudando, aunque se le vaya algún votante, porque la izquierda necesita tener activado a todo su electorado. Si intentas fagocitar a tu rival en el bloque, significa un desastre para los dos”, aprecia al hilo.
¿Cómo lo ve Toni Aira? El politólogo y profesor de la UPF-BSM contesta: “Las opciones de Yolanda Díaz serían altas en un país como Dinamarca y si esto fuera una serie como Borgen, pero en España sus posibilidades son muy escasas”. Explica que sería “muy complicado” que alguien llegara a La Moncloa sin ser el primer o segundo partido en unas elecciones.
“Creo que sus opciones son muy limitadas. Lo que pasa es que sí genera la expectativa de que esto puede pasar, es lo que ha descrito al Podemos más ganador, ese no conformarse con ser sólo una muleta del PSOE, sino generar expectativas de triunfo e ilusión. En su día se consiguió en el momento de máxima euforia de asaltar los cielos, con grandes resultados. Pero se ha perdido. Ahora se quiere recuperar. Pero más allá de una estrategia de posicionamiento muy bien planteada y ejecutada y con buen eco entre analistas, no hay nada que haga apuntar que UP le vaya a hacer el sorpasso al PSOE”, agrega el politólogo.
También opina Antonio Asencio, director de Comunicación de Sigma Dos. Según él, Yolanda Díaz “está saliendo como la política más valorada en nuestras encuestas, si bien es cierto que, aún al menos, por la mínima, apenas unas décimas”. “Esto es fruto sobre todo de la alta valoración que obtiene en el electorado de Unidas Podemos, por encima del 7, y por encima del 5 entre los votantes socialistas”, comenta.
En este punto, contextualiza: “Sin embargo, hay que ser muy prudentes a la hora de trasladar su valoración como líder al voto. Ya ha ocurrido muchas veces que el político más valorado era Duran i Lleida o Anguita en otras épocas y eso no implicaba un resultado explosivo en términos de escaños”.
“Las siglas pesan mucho en unas generales y está por ver que el espacio que ocupa Unidas Podemos, incluso con un cartel con tirón como Díaz, pueda arrancar al PSOE muchos diputados en zonas como Castilla-La Mancha, Extremadura o Castilla y León, donde los socialistas tienen un arraigo históricamente fuerte”, perfila antes de decir: “Sí hay más posibilidad de disputa y posibilidad de sorpasso al PSOE en las zonas más urbanas, donde este proceso ya se da en elecciones municipales y hasta autonómicas, como Madrid con Más Madrid”.
“En cualquier caso, con dos años de legislatura por delante la decisión de encumbrar un nuevo liderazgo tiene sus riesgos: sobre todo cuando estás en el Gobierno y corres el riesgo de quemarte con la gestión y porque al descubrir tu estrategia electoral tan pronto estás dando una información clave a tus rivales para que planteen un horizonte de desgaste durante todo este tiempo”, reflexiona Asencio. Lanza este último mensaje: “Veremos cómo se adapta el PSOE al liderazgo de Díaz. Mientras la valoración de Sánchez sea sólida entre sus votantes, como sigue siendo ahora, claramente por encima del 6, el peligro de fuga es limitado, aunque no deben en ningún caso despreciarla”.
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