Viajar al espacio desde el sofá de casa
Una recomendación de una serie... espacial.
Hoy no has quedado con nadie, no tienes plan y siempre te ha llamado la atención mirar hacia arriba para ver qué hay más allá del asfalto, el ruido y las decenas de edificios de oficinas clonados de tu ciudad.
La mayoría de los que habitamos el planeta Tierra no tenemos en la cuenta corriente dinero suficiente para darnos una vuelta por el espacio y los que lo tienen, todavía no se han decidido con qué compañía volar (Virgin Galactic, SpaceX, Blue Origin…) o esperan, como un multimillonario japonés, a que sus naves estén a punto para hacerlo de forma segura.
Seguramente, durante este siglo serán sólo unos pocos privilegiados los que puedan volar con una de estas compañías y disfrutar de un paisaje único que se quede tatuado en la retina para toda la vida.
Pero como todo tiene solución en la vida (menos la muerte), mientras tanto El Turista del Espacio será la serie que te ayude a entender y descubrir rincones que no podemos ver desde el asfalto. Por ejemplo, te cuenta cómo sería si pudiéramos viajar a destinos tan lejanos como Marte, Saturno, Júpiter o Mercurio, entre otros.
El divulgador científico especializado en astronomía, Álex Riveiro, junto a una voz más artificial que inteligente y algo irreverente llamada Norma, han viajado juntos a ocho destinos del espacio para acercarlos a nuestras mentes, ya que será difícil que podamos llegar a pasear en vida por ellos.
De primeras nos ahorraremos el viaje a Marte que tanto desea Elon Musk y que dura unos seis meses de media, para visitar el Monte Olimpo, que es el volcán más alto del sistema solar. También el Valles Marineris, un cañón que mide casi como la longitud de Estados Unidos. Como el Cañón del Colorado, pero a lo bestia, y cuidado con las tormentas de arena durante la visita, que duran incluso unos cuantos meses y puede ser que después de la aventura te quedes sin ver más allá de la palma de tu mano.
El viaje a uno de estos rincones tan espectaculares del espacio parece imposible por el momento, por lo menos para los que tenemos una cuenta “corriente”, pero escuchar esta serie con los ojos cerrados (si no estás corriendo en una calle con farolas) te permitirá saciar tus deseos de volar al más allá hasta que te toque El Gordo y consigas los cuatrocientos cincuenta mil euros que cuesta el pasaje de Virgin Galactic.
Escucha aquí los primeros episodios de El Turista del Espacio