¿Dónde ir de vacaciones con un gato? | Mejores lugares
¿Quieres vivir unas vacaciones con tu gato? En este post podrás decidir donde ir de vacaciones con tu gato. ¡Disfruta de unas vacaciones en la mejor compañía!
Para muchas personas la llegada del verano es sinónimo de relax y descanso, pero para otras muchas supone una preocupación: ¿qué hacer con el gato en vacaciones? ¿cómo darles los cuidados que necesitan? Hay casi 4 millones de estos pequeños felinos en hogares españoles y para muchos, como no podía ser de otra forma, no es una opción válida irse de vacaciones sin ellos. Por suerte, en los últimos años han aumentado el numero de destinos y alojamientos en España al que podemos ir acompañados por nuestra mascota. Ir de vacaciones con perros ya no es tan complicado como tiempo atrás y, por supuesto, ocurre lo mismo con los gatos.
Surge otra cuestión para los propietarios de estos animales: ¿es malo llevar al gato de vacaciones? Cierto es que a estos animales no les suele gustar mucho los cambios, por lo que si se trata de un viaje de poco tiempo no hay problema en dejarles solos en casa con comida y agua suficiente. Ahora bien, si hablamos de vacaciones más largas lo más recomendable es llevarle contigo.
Como el verano es una época para disfrutar y dejar las preocupaciones atrás, hemos ideado una pequeña guía con algunos lugares a los que poder ir de vacaciones con gatos y no tener que preocuparte.
Top 10 lugares de vacaciones donde ir de vacaciones con un gato
Hay que saber que no hay ninguna restricción conocida para viajar con tu gato por Europa o Estados Unidos y, mucho menos, por nuestro país. Aunque entendemos que lo más sencillo y cómodo es viajar dentro de España, por el tema del transportín o las vacunas necesarias, entre otras razones. Así que vamos a mencionar 10 lugares en España para ir de vacaciones con gatos:
Madrid
En Madrid hay muchos hoteles adaptados para llevar a tu gato, donde podréis dejarle fresco y protegido mientras salís a conocer la ciudad. Algunos incluso tienen “servicio de habitaciones” para ellos, es decir, pasan por la habitación de vez en cuando para asegurarse de que todo marche bien. Una buena opción si no sabéis donde ir de vacaciones con un gato.
En la capital encontrareis un destino ideal para pasar unos días. Las temperaturas en esta época son altas, pero los días muy largos, por lo que puedes aprovechar las tardes para estar resguardado en algún lugar fresco, y salir a horas más tardías cuando el calor respete un poco.
Aprovechad vuestro paso por Madrid para dar un paseo en barca por el Retiro, hacer compras por la Gran Vía o haceros una foto en la estatua del Oso y el Madroño en la céntrica Plaza de Sol, donde además podrás ver el reloj desde el que se dan las campanadas el 31 de diciembre.
Barcelona
Barcelona es un destino perfecto para conocer este verano. En la Ciudad Condal hay multitud de alojamientos adaptados para personas que viajen acompañados de sus mascotas. Estos hoteles disponen de todo lo necesario para el cuidado de tu gato en estas vacaciones (incluso camas específicas para ellos) para que disfrutes las vacaciones sin preocuparte en exceso por ellos.
La capital catalana es una de las ciudades más visitadas del mundo, y no es de extrañar viendo todo lo que se puede hacer. Podéis empezar por un baño en las magníficas playas que forman la costa de Barcelona, como es el caso de La Barceloneta o la Playa del Llevant.
Por supuesto, debéis visitar la Sagrada Familia, la obra maestra de Gaudí. Os recomendamos reservar las entradas con antelación, porque la cola para entrar puede llegar a ser de varias horas. El Barrio Gótico es uno de los más antiguos y bonitos de toda la ciudad, núcleo de la comunidad judía más grande de la península. Las Ramblas es otro barrio muy popular y siempre atestado por turistas. Aquí podréis disfrutar de la gastronomía local, hacer compras en los numerosos comercios o conocer la fuente de Canaletas, donde el equipo de fútbol, FC. Barcelona, celebra sus títulos. Terminamos el recorrido con el Park Güell, uno de los parques más bonitos del mundo y patrimonio de la humanidad por la Unesco.
Alicante
Si buscáis un clima cálido y buenas playas, la Comunidad Valenciana cumplirá vuestros deseos. Alicante es un lugar perfecto para ir de vacaciones con tu gato. Una vez nos establezcamos allí y dejemos a nuestro minino en uno de los muchos apartamentos u hoteles que admiten mascotas toca salir a conocer.
Esta provincia tiene mucho más que solo playa y chiringuito (aunque también es un planazo). De lo primero que debemos ver es el Castillo de Santa Ana, uno de los símbolos más reconocidos de la ciudad. Es un castillo árabe construido en el siglo IX, y utilizado como centro de detención en la Guerra Civil. Si quieres adentrarte en el corazón de Alicante, os recomendamos visitar el Barrio de Santa Cruz. Aquí podréis pasear por sus estrechas calles y disfrutar de un gran ambiente gracias a sus muchas tiendas y bares. Otro plan muy recomendable es coger uno de los barcos que salen cada día a la Isla de Tabarca.
Huesca
Otro planazo (cada vez más de moda) para este verano es alquilar un bungalow para pasar unas vacaciones con tu gato en un entorno natural.
Huesca ofrece unos paisajes dignos de ver. Hay muchas actividades diferentes que hacer, como, por ejemplo, rutas a caballo o a pie por los largos caminos que se pueden encontrar aquí. Si de naturaleza hablamos lo más destacado es el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, un gigantesco valle, corazón de los Pirineos, el cual alberga en su interior varias cascadas y ríos. Otro espacio natural perfecto para hacer senderismo es la Selva de Oza, en la frontera con Navarra.
Para reponer fuerzas podéis comer en sus preciosos pueblos. En Ansó, su apariencia medieval y sus casas de piedra te trasladarán a otra época. Es considerado uno de los pueblos más bonitos de España.
Cuenca
En Castilla La Mancha conviven muchos pueblos con encanto. Cuenta con numerosas zonas naturales donde se han levantado pequeñas cabañas de madera, como las casitas de Llano de los Conejos. Aquí no tendrás que preocuparte sobre que hacer con tu gato y mientras podrás aprovechar las numerosas actividades que hay. Muchas de ellas están pensadas para niños, por lo que es un plan genial si no sabéis dónde viajar con niños estas vacaciones.
En cuenca se encuentran las famosas Casas Colgadas, símbolo de la ciudad, y que se llaman así porque se encuentran al borde de un pequeño acantilado. Cerca de allí, está la Plaza Mayor, centro neurálgico de la ciudad y con muchos restaurantes donde comer. El puente de San Pablo o la Torre de Mangana son otros lugares que no debéis pasar por alto en vuestra visita a Cuenca.
Granada
Esta ciudad andaluza puedes ser el destino de tus próximas vacaciones, acompañado de tu gato, por supuesto, ya que hay muchos alojamientos que aceptan a nuestros bigotudos amigos.
Es una ciudad que sale en prácticamente todas las guías de viajes y planes vacacionales. Granada tiene algo que la hace única. Visitarla este verano puede ser un gran plan si no sabes dónde ir solo de vacaciones, aunque hay muchas más opciones. Esta ciudad tiene además algo de romántico que hacen de sus calles un espacio perfecto para ir bien acompañado (ya nos entiendes). Así que si estás pensando en hacer un viaje en pareja, Granada puede ser la solución.
Lo más reconocible es su majestuosa Alhambra, muestra inequívoca del paso de los árabes por la Península. Dejaros llevar por las preciosas callejuelas que atraviesan la ciudad y sentiros en el Al-Ándalus antiguo. Granada es también una de las varias opciones para disfrutar de unas vacaciones en las playas de Andalucía. Mención especial para la playa del Peñón de Salobreña.
Tarragona
Tarragona se declaró hace un par de años la Ciudad Amiga de los Gatos. Por ello, no resulta extraño la gran cantidad de sitios con las puertas abiertas a ellos, y que nos dejan gozar de unas vacaciones con nuestros gatos sin preocuparnos de qué hacer con ellos.
De nuevo el ocio y la naturaleza se dan cita en esta propuesta de vacaciones. Hay muchos espacios pensado para que toda la familia disfrute en un entorno natural, donde las actividades al aire libre y los camping priman sobre todo lo demás.
En la propia ciudad encontramos el anfiteatro de Tarraco (siglo II d.C), de época romana, fue una de las obras más impresionantes de la época. En él se celebraban combates entre gladiadores e, incluso, contra bestias. De este mismo periodo, tenemos el Circo Romano, uno de los mejores conservados de Europa y utilizado para carreras de carros. Otros lugares destacados son la calle de la Rambla Nova, donde tomar un tentempié o ir de compras; el barrio de los pescadores, Serrallo; y el acueducto de Les Ferreres.
Cantabria
No solo nosotros sufrimos las altas temperaturas, nuestras mascotas también. Por ello, Cantabria puede ser un buen destino si no sabes dónde ir de vacaciones con un gato este verano.
Los Picos de Europa son un imprescindible en tu viaje a Cantabria. Aquí encontrarás una gran variedad de paisajes y biodiversidad, incluyendo muchas especies que están amenazadas. Además de naturaleza, la tierra presidida por Miguel Ángel Revilla alberga pueblos de una gran belleza. Es el caso de Potes o San Vicente de la Barquera, por mencionar algunos de ellos. Potes es considerado uno de los más bonitos del panorama nacional. Se encuentra enmarcado entre montañas y se le conoce como el pueblo de los puentes por la gran cantidad de ellos que hay. En cuanto a San Vicente de la Barquera, es el pueblo pesquero por excelencia. Su origen se remonta a la época romana y cuenta con muchas playas en las que darse un baño.
Bilbao
Y si del norte hablamos, otra opción sobre qué hacer con tu gato estas vacaciones es llevarle contigo a conocer la capital del País Vasco. Bilbao es una ciudad viva, con mucho que ofrecer y que debes visitar al menos una vez en la vida.
Una de las imágenes más icónicas de Bilbao es el Museo Guggenheim, un sitio muy querido por los locales. Dentro te espera una impresionante colección de obras artísticas de gran belleza, pero si buscas no gastar en exceso también puedes pasear por sus alrededores. Tienes a Puppy, un jardín de flores en forma de perro, y la “araña de Bilbao”, la obra conocida como Maman (madre, en francés).
Puedes pasear por el Casco Viejo y enamorarte de su gastronomía a través de los famosos pintxos. Para probar estos magníficos aperitivos, te recomendamos visitar la Plaza Nueva. Puedes terminar la jornada paseando por las ría de Bilbao, que recorre gran parte del centro de la ciudad.
Asturias
Terminamos la guía con Asturias. Si quieres desconectar de las grandes ciudades te recomendamos encarecidamente visitar Asturias estas vacaciones con tu gato.
Es una tierra de montes verdes, donde el mejor plan es conocer el mayor número de parajes naturales que ofrece esta bella Comunidad. Además, sus pueblos tienen un encanto que te enamorarán.
No dejes de visitar el cementerio de Luarca, situado al borde de un acantilado, el Cabo de Peñas, donde observar un bonito atardecer, las minas de los lagos de Covadonga, un paisaje que mezcla lo tenebroso con lo bonito, y como pueblo más destacado Cudillero, un encantador pueblo pesquero.
El joven fotógrafo, de 23 años, quiso profundizar en el mundo felino haciendo fotos a los gatos desde abajo.
A Burba se le ocurrió esta idea cuando se preparaba para asistir al International Cat Show de su ciudad, Vilnius (Lituania).
"Me planteé lo de ir al Cat Show una semana antes de que empezara", contó Burba a la edición estadounidense de The Huffington Post por correo electrónico. "Dos días antes de ir, me di cuenta de que lo mejor que podía hacer era una sesión ...
Aunque Burba siempre ha sido un gran amante de los gatos, con esta sesión tuvo que correr un riesgo.
"En casa tenía una gata persa. Viví con ella de los 7 a los 20 años. Pero en un punto de mi vida, cuando tenía 19 o 20, desarrollé una alergia a los perros y los gatos. Probablemente sea por su pelaje. Por eso cuando fui al Cat Show tuve qu...
La mayoría de los gatos que fotografió Burba eran también lituanos, con un toque báltico.
Conseguir que los dueños pusieran a sus gatos sobre una superficie de vidrio fue fácil. No fue tan sencillo, en cambio, que los gatos cooperaran...
Lo más difícil fue lograr que los gatos que estaban asustados se quedaran de pie, asegura el fotógrafo. Con algunos fue imposible, por eso cada fotografía es única y natural.
Cada gato pasó uno o dos minutos en el cristal, lo suficiente como para que Burba les hiciera la captura perfecta.
Una de las gatas estaba tan cómoda que que se quedó tumbada todo el tiempo. No había forma de ponerla en pie.
Burba trató de distraer a algunos gatos con juguetes y llamándolos por su nombre.
Pero a la mayoría los retrató "sin ningún incentivo", dice. "Simplemente, les hice las fotos de cualquier manera, ya fuera andando o de pie".
