Una española lleva 13 días detenida por Israel sin juicio ni cargos
Juana Ruiz Sánchez es cooperante en la zona desde hace 30 años y vive en Belén, donde está casada con un palestino cristiano.
Se llama Juana Ruiz Sánchez y es un referente en la cooperación española con el pueblo palestino. Residente en Beit Sahour, junto a Belén (Cisjordania) desde 1984, es la coordinadora de proyectos de los Comités de Trabajos para la Salud, una ONG local que provee ayuda a la población en materia de salud y desarrollo. Hoy acumula 13 días detenida por Israel, sin que haya cargos presentados contra ella y sin juicio alguno.
Según ha denunciado su familia -su esposo Elías, un palestino cristiano, y sus dos hijos, que residen actualmente en España-, el pasado 13 de abril una veintena de soldados de las fuerzas de ocupación israelíes entraron en su vivienda a las 5.45 horas y se la llevaron.
Juani Rishmawi, como es conocida la ciudadana española, se encuentra desde entonces arrestada. Inicialmente, se dijo que su detención era administrativa, una fórmula de arresto indefinido que usa Israel contra los palestinos y que les priva de todo derecho, pero finalmente su abogado ha explicado a la Agencia EFE que se encuentra “detenida con propósito de interrogación”, una modalidad por la que, según la ley militar, puede permanecer encerrada hasta 75 días.
La familia comenzó el viernes una campaña para su liberación en las redes sociales y publicó un manifiesto en el que insta al Gobierno español a que “tome cartas en el asunto y presione cuanto esté en su mano para lograr la liberación de Juana Ruiz Sánchez con carácter inmediato”. Ya hay casi 1.400 adhesiones al texto, de diputados, cooperantes, abogados o sindicalistas. Izquierda Unida o CCOO han reclamado su puesta en libertad con comunicados emitidos durante el fin de semana.
“Juana (que tiene 60 años) ha sido arbitrariamente detenida y encarcelada por el Estado israelí sin que medie ningún cargo concreto y con el único argumento de que va a ser interrogada”, insiste el texto. Hace un mes, el Ejército israelí ya entró en la sede de la ONG para la que Juana trabaja, en Ramala, la capital administrativa de Palestina.
“Estas detenciones y la sustracción, el pasado 8 de marzo, de material informático y documentación del departamento de contabilidad de la organización nos hacen sospechar que los responsables buscan demostrar algún tipo de delito vinculado con la financiación de los proyectos que realiza”, señala la familia de Ruiz.
El diario El País sostiene que “el Consulado General de España en Jerusalén no fue informado oficialmente por las autoridades israelíes de su arresto, el primero de la trabajadora humanitaria después de 37 años en Oriente Próximo”. Gracias a la presión de su familia, el caso ha trascendido y le ha permitido tener asistencia consular.
Este lunes está prevista su comparecencia en la prisión cisjordana de Ofer, lo que podría ayudar a aclarar su situación tras días de caos, en los que la falta de datos y sus traslados han causado desazón entre los suyos. Se tiene constancia de que ha sido llevada en varias ocasionas a un centro de interrogatorios del Shin Bet, los servicios internos de información de Israel.
Su abogado, Ibrahim al Araj, ha declarado a la agencia Efe que la cooperante está muy preocupada, ya que no entiende por qué se la retiene después de tres sesiones judiciales para prorrogar su arresto. “Juana no está bien; está sufriendo mucho y cada día [que comparece] en el tribunal llora sin parar”, ha asegurado el letrado.