¿Un lugar que reúna proyectos de arte feminista? La Bienal MAV 2020 celebra su edición más digital
Más que nunca hoy, con la “nueva normalidad”, no debemos dejar de trabajar desde una perspectiva feminista, apoyando a las artistas y su trabajo.
En esta nueva normalidad que nos ha tocado vivir desde hace ya más de cuarenta días resulta que lo que pensábamos hace una semana no tiene sentido ahora, o al revés. La necesidad de adaptación según se van conociendo avances o nuevos datos nos hace replantearnos todo casi semanalmente. Algo así me contaba una colega que trabaja en un museo sobre la estrategia digital que habían tomado las dos primeras semanas de confinamiento y como ahora debían pensar el futuro inmediato, que pasa por nuevas relaciones en el arte, desde la distancia social hasta las citas previas o las visitas guiadas de grupos reducidos a las exposiciones.
Hace unas semanas hablábamos de lo que la crisis futura va a suponer para las mujeres artistas; pues bien, iniciativas ya existentes como la Bienal de Mujeres en las Artes Visuales, que celebra su tercera edición y que organiza la asociación MAV (Mujeres en las Artes Visuales), han sabido readaptar sus contenidos a la nueva realidad digital.
Para quien no la conozca, la BMAV produce y reúne iniciativas que visibilizan el talento de las mujeres y que tengan el género como eje de reflexión, debate y creación. A lo largo de todo el año se exploran, en un formato abierto, modelos alternativos para visibilizar y difundir la labor de las mujeres en las artes visuales contemporáneas.
Hasta ahora se han dado a conocer dos de las propuestas seleccionadas en la Bienal (se irán ampliando a lo largo de los próximos meses); cada una de ellas recibe un total de 3.000 euros para producción y sus contenidos pasan a formar parte del programa de la Bienal.
Herstory of art
La primera de las dos propuestas ha sido “Woman Art House”, un proyecto online de difusión de mujeres artistas contemporáneas y del que participan 11 autoras (Zanora Coperias, Yasmina García, Isabel González, Montaña Hurtado, Éncar Martínez, Beatriz Pereira, Laura Pinillos Villanueva, Sara Torres Sifón, Emma Trinidad, Naiara Valdano y Marina P. Villarreal).
La iniciativa surge en Twitter y más recientemente en Instagram, espacios donde cada semana una autora presenta mediante un hilo de tweets el trabajo de una artista contemporánea. Cada hilo se transforma en distintos posts y stories en Instagram y un artículo semanal que se publica en la web creada para el proyecto.
Una performance en torno a la vida y la muerte
Por su parte, el otro proyecto seleccionado es “XIII”, una performance de Paloma Orts, acompañada por la mediación artística de Miriam Domènech. Se trata de una acción en la que trece mujeres vestidas de negro dan vueltas sobre su propio eje mientras sostienen dos cubos de metal llenos de agua (vida) y cenizas (muerte) para sumergirse en un estado de catarsis, con la idea de “generar una fuerza extrema nacida del latido de las mujeres que, unidas, transitan del silencio a la palabra”.
La performance se ha realizado en dos ocasiones: el 3 de enero en el puente de las Siete Lunas, en el Parque Natural del Carrascal de Alcoy, y una segunda vez, el 13 de marzo en el IVAM CADA Alcoi. La acción tiene continuidad en un trabajo de archivo a partir del registro audiovisual y del testimonio de las trece mujeres participantes.
Los museos siguen abiertos en la red
Además, en la Bienal encontramos también las “propuestas invitadas”, aquellas actividades organizadas por museos, centros de arte, fundaciones, universidades, galerías y espacios educativos y culturales cuya temática y contenidos tengan como objetivo principal la visibilización de las mujeres en las artes visuales desde una perspectiva feminista. Entre otros encontramos al Museo Reina Sofía, la Sala Alcalá 31, la Casa Árabe, las galerías de arte Blanca Berlín y NF / Nieves Fernández (en Madrid); el CAAC de Sevilla, el CA3 de Córdoba, o 13 ESPACIOarte en Sevilla; Azkuna Zentroa - Alhóndiga Bilbao, Artium Vitoria o LABoral Centro de Arte y Creación Industrial de Gijón.
Las propuestas van desde mujeres en el arte pop a la revuelta feminista pasando por artistas reflexionando sobre la soledad y el amor, exposiciones colectivas que cuestionan los relatos de Occidente, o las relaciones que pueden establecerse entre esculturas y objetos de uso cotidiano. Los museos “abren” así sus puertas para seguir mostrando a mujeres artistas, bajo los condicionantes del presente donde la experiencia se ha vuelto digital.
La Bienal de Mujeres en las Artes Visuales celebra su tercer año sin dejar de apostar por las buenas prácticas en el sistema del arte y por continuar una labor intensa y productiva en favor de las creadoras. Más que nunca hoy, con la “nueva normalidad”, no debemos dejar de trabajar desde una perspectiva feminista, apoyando a las artistas y su trabajo. Quizá el futuro que viene pase por estrechar las colaboraciones, por los pequeños grupos y la cercanía, por el trabajo en horizontal, por el cuidado del planeta, por la sororidad. Por el feminismo.
