Un investigador del CSIC manda un mensaje a los padres que aún tienen reservas sobre vacunar a sus hijos
"Si no queremos que haya un brote tremendo en enero o febrero me parece muy buena idea vacunarlos”.
El investigador del CSIC Vicente Larraga ha mandado este martes un claro mensaje a los padres con reservas sobre si vacunar o no a sus hijos porque “a los niños la covid-19 no les produce por lo general ningún efecto grave”. Así se lo ha planteado el periodista Aimar Bretos en el programa de la Cadena SER Hora 25, y le ha preguntado qué les diría.
“Pues que piensen en la responsabilidad que tienen con respecto a los demás”, ha afirmado Larraga, quien ha precisado que los niños son “un segmento de edad muy móvil”, que están en contacto con mucha gente.
“Se está viendo que son un factor importante en la transmisión”, ha apuntado. Así, ha señalado que es necesario “no solo protegerlos a ellos, sino protegerlos para que además no infecten o infecten lo menos posible”.
“Imagínese en Navidades, que es una fiesta casi hecha para los niños, van a ver a todo el mundo, van a ir a cabalgatas. Si no queremos que haya un brote tremendo en enero o febrero me parece muy buena idea vacunarlos”, ha advertido.
Sobre los efectos secundarios que se pueden esperar entre los niños, ha afirmado que son “más o menos los mismos” que en los adultos, “incluso puede que menos porque a los niños les han reducido la dosis”. “Puede que en algún caso algo de fiebre, enrojecimiento, pero nada. Muy poca cosa”, ha asegurado.
Además, el investigador ha afirmado que todos acabaremos poniéndonos la tercera dosis porque “da una protección extra muy importante frente a la enfermedad más grave”.
“Incluso con la variante delta, que teóricamente no es de las más graves, estamos viendo un poquito de presión en las UCI, porque aunque haya menos enfermos graves, como hay muchos más infectados, el resultado es el mismo. Hay muchas personas que entran en las UCI”, ha destacado.
En ese momento ha resaltado que “también hay que proteger a todos los que no están protegidos”. “En África no llega al 10% del total de la población que está protegida”, ha señalado.
Y ha explicado que “mientras haya personas que no están protegidas con la vacunación el virus se moverá libremente, cuanto más libremente se mueva mayores mutaciones tendrá y tendremos nuevas cepas y cada una será distinta y probablemente más infecciosa que la otra”.